Con la nueva reglamentación para esta temporada 2014 de la Fórmula 1, algunos medios de comunicación vaticinaban que se verían cosas "impresionantes", soluciones "extrañas" y diferentes a los mismos problemas, y monoplazas mucho más espectaculares. No ha sido así. Hasta el momento, las escuderías de las que hemos visto sus coches (Ferrari, McLaren, Lotus, Force India y Williams) tienen un diseño muy similar. Cierto que la FIA restringe mucho la innovación en aras a la seguridad y a la mayor competitividad posible, pero aún así resulta muy llamativo que partiendo todos con diferentes equipos e ingenieros, se obtenga el mismo resultado.
Cierto es también que en la Fórmula 1 hablamos de diferencias de centésimas (con el permiso de Red Bull estos últimos años, en donde a veces ganaba por varios segundos), y que las tecnologías que se usan llevan años ya estando bastante bien definidas, e incluso sería comprensible que durante estos últimos años de poca o nula evolución, y con la salvedad de los escapes soplados o del alerón trasero de McLaren en 2010 (que hacía que en rectas fuera hasta 6 km/h más veloz que sus rivales y que luego, como el "ala de tiburón" de Red Bull, sería copiado por todos), el coche a principios de temporada era muy parecido entre todas las escuderías.