Mercedes-Benz celebra los 30 años de su clase compacta (los series W 201)


A finales de noviembre del año 1982, Mercedes-Benz presentaría dos de los modelos que sentarían referente y que serían un top de ventas de la firma germana en los próximos años: se trataba de los 190 y 190 E, unos modelos de las series W 201. Esta berlina compacta y tecnológicamente innovadora, complementaría así la línea de turismos de Mercedes-Benz, posicionándose en tercer lugar tras las series de la gama media y de la Clase S.

Con ello, Mercedes-Benz dio paso a una cartera de modelos más amplia, monstrando el camino a seguir en el futuro por toda la marca. Esto se debe a que no sólo marcó el inicio del segmento designado internamente a los coches de empresa, sino que acabó derivándolo también a los compactos, lo que posteriormente pasaría a denominarse la Clase C ("Compact"), estrenada en el año 1993 con el lanzamiento de las series W 202.



30 años después de su aparición, las berlinas de la marca de la estrella siguen demostrando su fortaleza y su permanecia atemporal. De hecho, aún hoy en día su imagen no se ha quedado obsoleta, dando muestras de una gran vitalidad y actualidad, e, incluso, sus líneas claras siguen deleitando como entonces.

Además del moderno diseño, del cual fue responsable Bruno Sacco de los modelos que, cariñosamente, eran denominados "Baby Benz", también se obtuvieron buenos resultados tanto en seguridad pasiva como en tecnología de suspensión, aerodinámica y diseño ligero inteligente. Entre otras innovaciones, Mercedes-Benz desarrolló y patentó la suspensión trasera multibrazo para el 190, que se basa en que cada rueda trasera es soportada en cinco puntos independientes, lo que ayuda a garantizar unos niveles de comodidad elevados y una precisión de conducción superior.


El 190 experimentaría en los años 1988 y 1991 dos facelifts, y, más de 10 años tras su lanzamiento al mercado, en febrero de 1993 la planta de Sindelfingen cesó la producción de esta primera generación de la clase compacta. Los modelos 190 continuarían siendo producidos en la planta de Bremen hasta finales de agosto, principalmente destinados a la exportación. En total, se fabricaron unos 1.878.629 coches, lo que refleja el impresionante éxito de esta nueva clase compacta. En mayo de 1993 se presentaría al público la nueva Clase C (W 202 series), como la sucesora del "Baby Benz".

En un principio, en 1983 sólo los modelos 190 y 190 E estaban disponibles con el motor de cuatro cilindros de dos litros, de gasolina (66 kW/90 CV y 90 kW/122 CV). En otoño de 1983, Mercedes-Benz presentaría el motor diesel "susurrante", de 53 kW (72 CV), con ocasión del Salón Internacional del Automóvil de Frankfurt, lo que causó una verdadera sensación gracias a que era muy silencioso, algo que logró Mercedes-Benz debido a la insonorización del motor.


En el año 1983 también hace su aparición el modelo 190 E 1.3-16, cuyo motor presentaba un nuevo desarrollo de cuatro válvulas por cilindro y producía 136 kW (185 CV). Este modelo se posicionó como tope de gama, ofreciendo un nivel de deportividad, algo que demostró en algunas carreras en las que partició.

Más motores se añadirían en los años siguientes, incluyendo versiones destinadas a la exportación, con motores más grandes para el mercado norteamericano.










| Redacción: Revista Coche

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