
En los últimos años, Citroën está inmersa en un proceso de renovación que, basado en la evolución de sus modelos, afecta también a la imagen de su red comercial, a la relación con los clientes y a sus servicios. La gama actual de Citroën es clave en este proceso. Tanto el Citroën C3, como los C4 y C5 suponen un claro avance respecto a sus antecesores en lo que se refiere a diseño, prestaciones, acabados y equipamiento.
Además, Citroën ha decidido lanzar una propuesta inédita con la creación de una línea distintiva, la Línea DS, pensada para conductores que exigen más a su vehículo, personas que desean un coche que les permita distinguirse en materia de diseño, arquitectura, sensaciones y refinamiento, además de disfrutar de lo mejor de la tecnología Citroën.