La crónica: ¿Pecó ayer Fernando Alonso de pasividad?

Tras el Gran Premio de Europa celebrado ayer tarde en Valencia, muchas son las voces que se han levantado poniendo en primer plano la falta de agresividad de Fernando Alonso en carrera, no su forma de conducción, la cual está fuera de toda duda, sino más bien su nefasta visión de carrera. Y es que no es la primera vez que le ocurre esta temporada.

Primeramente, siendo incapaz de adelantar a Lewis Hamilton en la salida, el cual llevaba un coche claramente inferior y, además, dañado. Segundo, su mala (por no decir nefasta) gestión del Safety Car en pista, que le condenó a pasar el resto de la prueba en la parte trasera del pelotón y sin posibilidades de adelantar a nadie. Ahí se acabó el Gran Premio para Alonso.


De poco sirven las quejas y lloriqueos luego de terminar la carrera, en donde Alonso acusaba a la dirección técnica de no haber sancionado más gravemente a Hamilton. Lo lógico hubiera sido, como hizo el inglés, adelantar al Safety Car (que aún estaba en la calle de boxes) teniendo en cuenta que Alonso iba pegado al McLaren, y luego que los comisarios decidieran sanción, pero no tirar por la borda todo el tiempo y ventaja acumulados hasta entonces.

Porque está claro que la FIA no se atreve a penalizar ejemplarmente a pilotos que van punteros, algo que quedó suficientemente demostrado cuando sólo le impusieron a Lewis un "paseo" por el pitlane en forma de drive through que no sirvió siquiera ni para que perdiera posición.

No es la primera vez que le ocurre a Alonso, me refiero a la mala gestión de las carreras. Ya en China "perdió los nervios" saliendo antes de tiempo, y luego "confiando" en que castigasen a Michael Schumacher en Mónaco (cosa que hicieron, pero en otros tiempos el asturiano no se hubiera dejado adelantar de esa forma), o adelantando "marrulleramente" a Massa en la calle de entrada a boxes cuando pocos días antes había aclarado que no lo haría "porque le respetaba y no se iba a arriesgar con un choque".

Errores que evidencian una falta de concentración o, cuanto menos, una falta de visión general de las carreras, y que luego confía en que sean los comisarios quienes ganen las carreras en los despachos que él no ha podido (o no ha sabido) ganar en la pista.

Ayer, repito, lo lógico hubiera sido no desprenderse de Hamilton ni aunque se acabase el mundo, pasara quien pasase, y luego, si le querían quitar algo de lo que él había ganado en pista, que lo hicieran, pero no quedarse pasivo "a verlas venir" y a esperar que los comisarios le regalaran los puntos para que se llevase el Gran Premio bajo el brazo, algo que, lógicamente, no iban a hacer porque sino el escándalo sí hubiera sido monumental.

Luego, cuando la decisión de la FIA no nos gusta (porque, recordemos, decisión SÍ hubo, y castigo a Hamilton TAMBIÉN hubo), entonces comenzamos a criticar y a lanzar basura contra todo el mundo. Lógicamente, no se le puede pedir una cura de humildad a un piloto de este calibre, porque extrañamente sepan lo que es eso, pero, a falta de tener esa virtud, cuanto menos que tengan visión de carrera.

Por último, alguien debería recordarle a Fernando Alonso (y, en general, a la gente de Ferrari), que para ganar carreras hay que empezar haciendo poles. Sino, mal vamos.