Alrededor del 70% de todos los modelos Porsche construidos a lo largo de la historia de la compañía están todavía en condiciones de circular. Para satisfacer la necesidad de emplear los neumáticos adecuados, Porsche ha desarrollado, probado y validado una serie de productos que se adecúan a las generaciones de coches específicas, incluyendo los neumáticos autorizados en coordinación con Pirelli.
Los nuevos desarrollos coinciden con los originales en cuanto a su aspecto y perfil de diseño, pero cuando se trata de propiedades de conducción cumplen totalmente los requerimientos de las modernas generaciones de neumáticos. Para modelos de los años 1959 a 2005, hay disponibles un total de 32 nuevas recomendaciones, que comprenden la gama Porsche 356 (B y C), Porsche Boxster (986) y Porsche 911 (modelo G, 964, 993 y 996), así como los coches Porsche 924, Porsche 928, Porsche 944 y Porsche 968, que tenían la configuración de motor delantero y caja de cambios trasera (transaxle). Los neumáticos clásicos también tienen la certificación “N” de Porsche “, que los identifica como especialmente validados por la marca.