"¿Cuándo llegamos?", "¿Falta mucho?"… Éstas son sin duda algunas de las frases más escuchadas por quienes viajan en coche con niños, sea cual sea la duración del trayecto. Realmente, trasladarse con los más pequeños de la casa no es misión sencilla, pero Arval, la compañía de movilidad de BNP Paribas, te proporciona unos sencillos "tips" para mantenerlos distraídos y, de paso, evitar a los mayores las temidas tensiones al volante, sobre todo ahora que empieza la época de los largos desplazamientos.
Antes de ponerse en marcha, hay que asegurarse de que se utiliza un sistema de retención infantil adecuado para la estatura, edad y el peso de los niños. Conviene saber que las sillas para niños de hasta 13 kilos de peso deben colocarse siempre en sentido contrario a la marcha y en los asientos traseros. Cuando el pequeño supere ese peso o su cabeza sobresalga del respaldo hay que pasar a una silla que se coloca con arneses mirando hacia delante. Muy importante instalarlas antes de sentar a los niños y a ser posible, siempre en el asiento trasero central, que es el más seguro. Conviene recordar que estamos ante un sistema obligatorio para todos los menores de 12 años. A partir de esa edad, podrán utilizar el cinturón de seguridad de los adultos, siempre que su estatura mínima sea de 145 cm. Si mide menos, recuerda que no puede viajar en el asiento delantero, a menos que utilice un asiento de seguridad homologado.