
La reducción del IVA en las compras de automóviles desde el 18% actual hasta un tipo reducido del 8% tendría un coste aproximado de 528 millones de euros anuales para las arcas públicas pero incrementaría la demanda en unos 150.000 vehículos, lo que a su vez generaría cerca de 364 millones de euros por la recaudación adicional directa derivada del Impuesto de Matriculación, en su caso, IVA, e impuestos sobre los combustibles, sin contar otros beneficios sociales medioambientales, que compensarían el coste de la medida, según cálculos de la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor (GANVAM), que representa a 4.600 concesionarios/servicios oficiales y 3.000 compraventas.
Esta estimación realizada por Ganvam se enmarca en un programa de propuestas a los partidos políticos que concurren a las elecciones generales del 20-N para sacar al sector del automóvil de la crisis de ventas, cuya caída superará este año el 50% respecto a los niveles previos a 2008, situándose en el entorno de las 830.000 matriculaciones, con una pérdida estimada de 5.000 empleos.