Renault llama a revisión a los nuevos modelos eléctricos Twizy debido a que se ha detectado un riesgo de pérdida de eficacia del frenado, provocado por una fuga lenta del líquido de freno en los estribos traseros, que se traduce en un alargamiento progresivo de la trayectoria del pedal de freno (sin aparecer encendido del testigo en el cuadro de instrumentos). En los talleres se revisarán los frenos y, de haber fuga en el dispositivo, se sustituirán.
Fiat llama a revisión a un buen número de unidades de sus modelos 500, Punto, Linea, Qubo y Dobló en la versión Panorama. Los números de chasis para los modelos afectados son: del 500, entre 878086 y 890578; del Punto (modelo 2012) entre el 893879 y el 910396, así como entre el 1890069 y 1905356. Del Linea, entre 3183243 y 3186540; del Qubo, entre el 309125 y 317723, y, finalmente, del Dobló, entre 9190651 y 9201833.
El motivo parece ser que el conector del servo freno no cumple los estándares del fabricante, por lo que se podría reducir la eficacia de frenado e, incluso, provocar un accidente.
Honda llama a los modelos de CR-V con motor de gasolina 2.0 (RD8) y de gasóil 2.2 (RD9), fabricados entreel 07 de noviembre de 2001 y el 06 de octubre de 2006, y con las siguientes numeraciones de VINs:
Para los de motor de gasolina, del año 2002 desde SHSRD87702U000101hasta SHSRD88602U036601; del año 2003 desde SHSRD87603U100101 hasta SHSRD87603U134080; del año 2004 desde SHSRD87604U200101 hasta SHSRD87204U237794; del año 2005 desde SHSRD87605U300101 hasta SHSRD88605U327908, y, finalmente, del año 2006 desde SHSRD87206U400101 hasta SHSRD87806U430680.
Para los diésel, del año 2005 desde SHSRD97605U000101 hasta SHSRD97605U026519; del año 2006 desde SHSRD97906U100101 hasta SHSRD97606U128028. El motivo es que bajo algunas condiciones de operación, agua, lluvia o cualquier otro líquido, éste podría entrar por la ventana del conductor y llegar al interruptor principal de los elevalunas que resultaría en una alteración de la función del mismo. Si éste se dañara como resultado de la intrusión de líquido resultaría en un fallo del interruptor y su sobrecalentamiento. Un interruptor sobrecalentado puede derretirse provocando humo o, potencialmente, un incendio.
En el taller el interruptor del elevalunas del vehículo será inspeccionado, si está afectado se sustituirá por una versión mejorada con protección contra el ingreso de líquido. Si no está afectado, se montará una protección contra el ingreso de líquido.
| Redacción: Revista Coche
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