
La crisis que sufrió el mercado español no frenó los planes de crecimiento ni de futuro de SEAT. La multinacional automovilística española creció casi un 14% en 2010, gracias al repunte de sus ventas y al éxito comercial de sus productos. La filial del Grupo VW obtuvo unos ingresos de 4.663 millones de euros, frente a los 4.101 millones del ejercicio anterior. Asimismo, destinó 518 millones de euros, 11 más que el año pasado, para afianzar su futuro. Con todo este esfuerzo, SEAT mejoró un 44,4% sus cuentas al cerrar 2010 con un resultado después de impuestos de -104 millones de euros, frente a los -187 del ejercicio anterior.
SEAT demostró, una vez más, su capacidad de generar recursos a través de su actividad básica (la producción y venta de automóviles y componentes) y obtuvo un EBITDA (resultado antes de intereses, impuestos, amortizaciones y depreciaciones) positivo, de 35 millones de euros, más del doble que en 2009.