McLaren presenta el MP4-27 de Fórmula 1, sin pena ni gloria

Actualización: Añadido vídeo del evento.

Que lejos -lejísimos- quedan ya aquéllas fastuosas presentaciones de los monoplazas de Fórmula 1, como la de Valencia en el año 2007 con el marco incomparable de las instalaciones de la Ciudad de las Artes y las Ciencias, en donde, de la mano de Fernando Alonso y Lewis Hamilton, se presentó el MP4/22. Allí se incluían incluso actuaciones estelares tan impresionantes como las del Circo del Sol o la carísima violinista Vanessa Mae. Todo ello con una factura que rondó los 4 millones de euros y que pagó sin rechistar el Banco Santander.

El mismísimo Ron Dennis agradecía a las autoridades públicamente su implicación, con discursos cargados de florituras como sus declaraciones, en donde afirmaba "agradecer a la Generalitat Valenciana y, en particular, al Presidente Don Francisco Camps Ortiz y al Conseller Don Gerardo Camps Devesa por su apoyo y por hacer que el evento de hoy sea posible. Para llegar a la gente es necesario que vean y sientan al equipo y esto es lo que nos proponemos hacer hoy en Valencia".



Todo eso contrasta, repito, con lo vivido ayer: apenas un puñado de medios muy especializados se hicieron eco de la presentación del nuevo McLaren para la temporada 2012, presentado "casi a escondidas" en su propia fábrica inglesa de Woking y con la única "estrella invitada" de una sábana, que ocultaba el monoplaza (que, por cierto, no se encargaron de retirar ni unas azafatas, sino sus propios pilotos, Jenson Button y Lewis Hamilton). Incluso las fotografías repiten el estilo (son calcadas, como puedes comprobar) de la presentación del año pasado. Ya no hay fiestas, ni música ni jolgorio. Y el coche, el protagonista, tampoco se llevó ningún elogio. Porque, como puedes comprobar, no destaca en nada. Y es que en McLaren se preocuparon muy mucho de ocultar las partes más "sensibles" del monoplaza: los escapes y sus posibles derivaciones los tapaban muy bien con la cubierta motor, y el difusor se encargó de mantenerlo oculto un trozo de plástico.

Está claro que, lo más llamativo, de incorporar algo al coche, lo harán en los primeros entrenamientos. Mientras tanto, la música ha cesado. Que rugan los motores.






| Redacción: Revista Coche