¿Quién lo iba a decir, verdad? Hace solo un par de años nadie creía en el coche eléctrico, todos pensaban que su marco de uso estaba aún "demasiado lejano". Pero he aquí que las marcas de automóviles más poderosas del planeta lanzan sus proyectos eléctricos, y, en el momento en el que esos se comienzan a vender, ¡por arte de magia sube el barril de Brent y el coche eléctrico ya es más rentable!
Lógicamente, aún estamos lejos de ver nuestras ciudades inundadas por coches con esta tecnología, pero la gasolina tiene sus días contados (o sus años, para ser más exactos). A partir de ahora la apuesta será eléctrica. Y es que si el crudo sube más de 100 dólares por barril de Brent (el Brent está a 105, y a día de hoy llenar el depósito de combustible ya cuesta 67 euros, tras el récord histórico de subida de la gasolina de ¡un 12% en un año!), tener un coche con motor de combustión interna ya no compensará frente a un eléctrico.
Eso sí, tranquilidad, que nadie vaya a su concesionario a comprarse un eléctrico. Pero como el Brent siga subiendo, en unos años habremos amortizado el sobreprecio de un eléctrico con creces. ¿Es que alguien dudaba, en cuanto los lobbies de la industria automotriz se metieran en esto, de que el eléctrico no tendría futuro? Si es que está claro: es simplemente interés lo que falta para cambiar las cosas.
| Redacción: Revista Coche | Imagen: Renault
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