Felipe Massa le regala el tercer puesto a Fernando Alonso


"Dos no discuten si uno no quiere", reza un dicho, y en éste caso parece acertadamente responder a lo visto ayer en el Gran Premio de Fórmula 1 celebrado en Austin. Tras quedar octavo en la parrilla, Fernando Alonso salía desde la séptima posición gracias a que en Ferrari decidieron romperle los sellos a la caja de cambios de Felipe Massa (no se la cambiaron, no obstante), que salía el sexto, y así incurrir en sanción para que el brasileño dejara una plaza libre y adelantara con ello Fernando Alonso su posición. Una argucia legal que muchos no dudan en considerar como "trampa", y es que, en efecto, lo es. Porque todo lo que sea adelantar a coches "en los despachos" porque no puedes adelantarlos en pista no es más que una trampa.

Curiosamente muchos de los periodistas que pusieron el grito en el cielo cuando hace dos semanas en Red-Bull decidieron salir del pit-lane para cambiarle la configuración del coche de Vettel (le cambiaron la séptima marcha, entre otras cosas) ayer se mantenían callados ante la trampa de Ferrari, sin decir "esta boca es mía". Redactores de diarios y de televisión de sobra conocidos por todos llegaron a asegurar que "todo el pit-lane está en contra de Vettel por la trampa que hizo en Abu-Dhabi", y, sin embargo, ayer mantenían un sospechoso silencio sobre el subterfugio de Ferrari. No es que aquí vayamos a defender a unos o a otros, nos importa un carajo y sólo tratamos de defender la justicia y la limpieza en el deporte. Afortunadamente, como blog en Blogdspot que somos, no tenemos vendida nuestra independencia a nadie. Quizá por eso estemos aquí y no en otro sitio. Pero no entendemos esa vara de medir de doble rasero que muchos emplean y nos quieren hacer colar a los demás, y me parece mucho más grave, o "sucio", como lo queráis llamar, sacrificar a un piloto de tu escudería que va mejor en ese circuito, que cambiar una de las marchas de tu coche para que corra más. Los que criticaban a Sebastian Vettel hace dos semanas, con mayor razón deberían haberlo hecho ayer en Austin a Fernando Alonso. Pero no lo hicieron. Y ahí se comprobó una vez más lo "vendidos" que están algunos medios. Lo paradójico es que si dices esto, inmediatamente te tachan de "antialonsista" o términos similares, pero creo que pocos blogs como éste han defendido a Alonso tanto como nosotros. Porque es un excelente piloto y eso nadie se lo niega.



No quiero decir con ésto que Massa debería haberse negado, o "pataleado" (si en lugar de Massa fuese Hamilton, por ejemplo, no se hubieran atrevido a hacerlo). No es que Massa sea un mal piloto tampoco, lo único que le ha ocurrido en su carrera es que ha tenido muy buenos compañeros, algunas veces por fama (caso de Schumacher) y "galones", otras por pura valía (Fernando Alonso le ha superado casi siempre esta temporada) y otras por meteduras de pata de su equipo (como en la época con Kimi Raikkonen), se ha tenido que conformar con ser siempre simple escudero. Y es muy buen escudero, todo sea dicho.

A estas alturas nadie es tan ingenuo tampoco como para pensar que la argucia de ayer la hicieron en Ferrari "por amor a Alonso", no seamos tan inocentes. Una escudería como Ferrari sólo respeta y es sensible a una sola cosa: el dinero. Les importa un pimiento todo lo demás. Cuando hablan que para ellos lo importante es Ferrari, no mienten. Realmente lo es. Y lo que aman de Alonso son principalmente, y sobre todo, los millones del Banco de Santander que el español ha traído consigo (el Santander es el principal espónsor de Ferrari, y sólo hay que ver la presencia de Botin en prácticamente todas las carreras para comprobar la influencia que tiene), aunque ellos y los periodistas corruptos nos quieran vender otra cosa. Lógicamente, no es Botin quien pone y quita a nadie de su asiento, pero quien tiene el dinero, manda. Y en este caso el dinero lo tiene él. Claro que todo forma parte del juego: si se dijera la verdad sería tan lamentable y patético que nos darían ganas de llorar. Seguir a una bandera o una escudería así es tan patético como seguir a un cubo de basura porque nos guste su forma o sea de color azul.

Quede claro que la culpa tampoco es de Fernando Alonso. Hoy en día en la Fórmula 1 el piloto importa bastante poco, lo importante es el coche. Y con una "carraca" como el F2012 (¿recordais el año pasado cuando Montezemolo nos vendía la moto de que habían hecho un coche "revolucionario"?, claro que todo forma parte del mismo espectáculo), poco puede hacer. Las piezas de ayer eran reformadas a mano con tijeras y radiales, en un trabajo artesanal que sería de risa sino fuera por sus peligros (el polvo de carbono es altamente tóxico) y que ni siquiera escuderías como HRT hacen. ¿Es esa la imagen que se nos quiere vender de escudería puntera e innovadora? ¡Qué diferente es todo de la realidad! Por eso al "gran circo" se le denomina también "la gran mentira".


Ante todo esto, ¿qué debería haber hecho Fernando Alonso ayer? No soy quien para decirle a nadie, y menos a un piloto, lo que tiene que hacer, pero sí puedo decir lo que yo haría: Massa era más competitivo, le dejaría salir en el puesto que legítimamente se ganó con su esfuerzo, y que disfrutase del tercer cajón en el podium que, sin duda, lograría.

Y es que el brasileño ya le hizo no pocos favores durante la temporada a Fernando, una vez dejándole pasar y otras pisando el freno para no adelantarle, no era necesario castigarle ni denigrarle más. Pero la desmedida ambición de Fernando Alonso no le permitió semejante gesto de generosidad. Es el punto flojo de Fernando. Eso ya le causó problemas en McLaren (cuando tenía el mejor coche de la parrilla, no ol olvidemos) y ahora se los causa en Ferrari, aunque mientras lleve a la escudería italiana los millones de euros que lleva, ellos tragarán y harán como si no les importa ("la pela es la pela", que dirían algunos). Hay que ser competitivo y ambicioso, pero nunca debería serlo nadie a costa de humillar a su compañero. Las lágrimas de Massa ayer sólo es una muestra de lo que la ambición mal entendida puede causar.

El próximo domingo Vettel será, Dios mediante, de nuevo campeón del mundo. Y este tercer puesto de ayer no habrá servido para nada. ¿No hubiera sido un buen gesto dejar que Massa corriese su propia carrera? Pero los millones de euros de Botin pesan mucho. Fernando: ¿realmente tu dignidad vale tan poco? Yo, humildemente lo digo, no quisiera un trofeo en mi vitrina conseguido con trampas ni a costa de humillar a mi compañero. Pero hay gente que tiene estómago para tragar con todo.

| Redacción: Scott Hebron

1 comentario:

  1. Anónimo19.11.12

    Muy bien dicho. He leído de todo últimamente, pero no las "verdades del barquero" tan claras como ésta. Felicidades.

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