
Toyota tiene problemas, muchos problemas, con sus vehículos. Inicialmente fueron en los Estados Unidos, e inicialmente se dijo que eran "fallos menores" de una alfombrilla que "se movía" por la forma de conducir de algunos conductores. Pero el caso es que de eso había bastante poco, sobre todo cuando empezaron a surgir cada vez más accidentes y obligó a la compañía japonesa a hacer llamadas a revisión multitudinarias (llegó a llamar a miles de vehículos, cuando no a producciones enteras).
Pero el caso ha llegado a tales niveles, y al parecer no era solo la alfombrilla, sino algo mecánico (el sensor de posición del acelerador), aunque en un primer momento intentaran quitarle "hierro al asunto". Hoy ha llegado a tal punto que se ha tenido que detener la fabricación de los modelos RAV4, Corolla, Matrix, Avalon, Highlander, Tundra, Sequoia y algunas versiones de los Camry.