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Durante la tarde de ayer, la web de Toyota estaba completamente saturada, inaccesible. No, no era un ataque de los hackers de Anonymous. Sencillamente, era la presentación de la versión "Plug-in" ("enchufable") de su modelo Prius 2012. Todo un acontecimiento, si tenemos en cuenta lo que ha supuesto -y supone- el modelo Prius a nivel mundial, incluyendo el precedente de modelos híbridos y eléctricos que ha sentado. Y gracias a él en buena parte es que ahora las demás marcas se lanzan sin temor a ofrecer coches eléctricos. Si el Prius hubiera supuesto un fracaso -afortunadamente, no fue así- la historia del nacimiento de más versiones eléctricas se habría retrasado, probablemente, mucho tiempo.
Por ello quizá, este nuevo Prius sigue la misma filosofía de sus modelos precedentes: un coche que tanto puede servirte de monovolumen como de pequeña furgoneta, salvando las distancias, y con lo mejor del mundo de todos ellos. El disponer de un vehículo así es también la fuente de su éxito.
No es extraño, tampoco, que la presentación haya tenido lugar en los Estados Unidos: Toyota lleva vendiendo allí el modelo Prius desde su primera generación, en el año 2001. El Prius Plug-in puede funcionar en modo totalmente eléctrico (EV) hasta un total de 24 kilómetros, a una velocidad máxima de 100km/h. Se puede recargar, además de en el modo convencional (es decir, haciendo funcionar el motor de combustión y aprovechando también la energía cinética de las frenadas para recargar sus baterías) mediante un enchufe convencional de corriente alterna (AC), con un circuito dedicado de 15 amperios. Es decir: si durante la semana nuestro recorrido total por la ciudad no es mayor que esos 24 kilómetros, podemos usar el Prius Plug-in sin gastar ni una gota de gasolina. Luego, para alguna escapada de fin de semana, podemos recurrir al motor de combustión interna (de ciclo Atkinson) para funcionar como un coche normal.
Además, este Prius, a pesar de su nueva característica de recarga por enchufe, mantiene el mismo habitáculo para cinco pasajeros que el Prius convencional, y el mismo espacio de carga. El sistema de este modelo parte del mismo Hybrid Synergy Drive del Prius estándar, aunque con un pack de baterías más modernas, de nuevo desarrollo y de tecnología de iones de litio (Li-ion), de 4.4 kWh, más ligeras que el modelo estándar, que son de niquel metal (NiMH, os sonará porque de esa misma tecnología eran las baterías de los antiguos teléfonos móviles). Están situadas en el mismo sitio: bajo el compartimento del maletero.
Respecto al tiempo de carga -una cuestión importante-, también es bastante aceptable: tarda solo un poco más que cualquier teléfono móvil de última generación: de 2.5 a 3.0 horas, usando un enchufe para corriente de 120v. No obstante, también podemos recargarlo en sólo 1.5 horas si preparamos nuestra instalación para aceptar una toma de corriente de 240v, lo cual es ya sorprendente. El cable de 120v va incluído con la compra del Prius y, al contrario que otras marcas -como Renault-, sus baterías no son de alquiler: se venden con el coche y cada conductor podrá disponer de ellas tranquilamente.
Antes del lanzamiento de este modelo enchufable, Toyota ha realizado un exhaustivo (y extensivo) programa de test que incluía a nada menos que 125 prototipos, en los Estados Unidos. Esto ha incluído fases de ingeniería con personal experto, pero también pruebas reales con clientes.
Lógicamente, en cuento a equipamiento y prestaciones, este nuevo Prius no tiene nada que envidiar al modelo convencional del que parte.
Toyota ya ha anunciado precios para Estados Unidos tanto de la versión Plug-in como de la V:
- Prius Plug-in: 32,000 $ (23.192 €)
- Prius Plug-in Advanced: 39,525 $ (28.645 €)
- Prius V Two: 26,400 $ (19.133 €)
- Prius V Three: 27,165 $ (19.687 €)
- Prius V Five: 29,990 $ (21.735 €)
| Redacción: Revista Coche | Galería de imágenes
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