Opel cerrará su fábrica en Bélgica

De Opel-Meriva-2010

Ayer corrían insistentes rumores sobre esta más que probable decisión, pero aquí, en Revista Coche, decidimos no publicar nada hasta que, al menos, se supiera de manera más seria (o "extraoficialmente").

Lamentablemente, esta tarde la propia compañía lo ha confirmado: Opel pretende cerrar durante el curso de este año la planta que posee en Amberes, Bélgica, y que emplea en la actualidad a casi 2.300 trabajadores. "Comprendemos plenamente el efecto que este anuncio tiene en los empleados de Amberes y sus familias y nos solidarizamos con ellos", dijo el director general de Opel Nick Reilly, "muchos se han dedicado a la planta de generación en generación y han hecho un trabajo excelente en la producción de automóviles de gran calidad. La decisión anunciada hoy no fue tomada a la ligera, sino que es el resultado desafortunado de la realidad empresarial actual. Debemos hacer este anuncio ahora de manera que podamos garantizar un futuro viable para el conjunto de Opel y Vauxhall y sus operaciones ".


En resumen: "lo siento, pero tenemos que cerrar", sería la traducción -muy libre- a todo ésto. La crisis mundial, y la propia crisis de GM, son las causas principales, y no parece que vaya a recuperarse el mercado a corto plazo: Opel tiene datos de que en Europa occidental, y para este año, la reducción de ventas global de vehículos sea de nada menos que 1.5 millones por debajo de las ventas de 2009, lo que supone 4 millones menos que en el año 2007.

Por lo tanto, y para lograr su supervicencia, Opel necesita urgentemente reducir su capacidad un 20 por ciento. Por el momento Opel no ha dado fechas, pero se espera que el cierre sea efectivo "en los próximos meses", y con la reducción de esos costes la compañía pueda afrontar mejor su futuro y lanzar los modelos previstos.

En total, y teniendo en consideración todas las plantas de Opel-Vauxhall, el plan presentado por la compañía contempla una reducción de 8.300 puestos de trabajo. Amberes aportará bastantes miles de esos nuevos "desempleados". El gobierno belga, por su parte, calificó a Opel de estar en una situación catastrófica y dejó caer que ésta "sobrevive únicamente gracias a las ayudas del gobierno alemán".

Fuente: Opel / Revista Coche