
Suzuki llevará al Salón del Automóvil de Tokio (que se inaugurará el 30 de este mismo mes) un modelo experimental que, si colocaran en el frontal el logo de Citroën, cualquiera pudiera pensar que es una versión actualizada del querido Ami6. Pero no, no tiene nada que ver, aunque la imagen -al menos a mí particularmente- nos lleve a recordar el coche francés.
El Regina quiere ser el adelanto para el compacto global de la marca japonesa, un modelo fácil de mantener, común y utilitario con todo lo que dicha palabra lleva consigo (si lo han conseguido ya antes con el Alto, por qué no lo van a conseguir con éste). Su peso es de solo 730 kg, y está propulsado por un pequeño motor de gasolina cuyo consumo es de 3,1 litros a los 100 km, y unas emisiones de 70 gr/km de CO2.