
El gas natural licuado (LNG) es una alternativa viable para los camiones que realizan operaciones de largo recorrido, con emisiones más bajas de dióxido de carbono, frente al diésel, pero todavía es necesaria la creación de las infraestructuras necesarias para su puesta en marcha en Europa. Volvo Trucks está volcando sus esfuerzos en crear “corredores azules” con estaciones de servicio estratégicamente ubicadas y hacer de este modo más accesible éste combustible.
La industria del transporte origina en Europa aproximadamente el 25% de las emisiones de CO2, por lo que se hace necesario encontrar alternativas competitivas frente al diésel. El gas natural es una de estas alternativas; si bien es cierto que es un combustible fósil, ofrece numerosas ventajas sobre el diésel, y además es más económico. Pero cuando el biogás licuado (LBG) se haga más común en el uso, la huella medioambiental de los vehículos que lo utilicen se reducirá hasta en un 70%.