
Gracias a la capota insonorizante incorporada de serie, el espacio interior del cabrio de la Clase E con la capota cerrada es uno de los habitáculos más silenciosos en el segmento de los descapotables de lujo con cuatro plazas y capota de lona. El aislamiento acústico de alta calidad de la nueva capota reduce claramente el nivel de ruidos en el interior del vehículo en comparación con una capota de lona convencional. El nuevo material absorbe mejor los ruidos exteriores originados por otros vehículos y el ruido del viento. En la práctica, la diferencia se aprecia a partir de unos 80 km/h: por ejemplo, al entrar en un túnel
o al adelantar a una caravana de camiones. A altas velocidades se aprecian mejor todavía las ventajas de la capota insonorizante: con su ayuda —al menos desde el punto de vista acústico— es posible telefonear a más de 200 km/h haciendo uso de la función manos libres.
Como es natural, la capota es hermética al agua y al viento e idónea sin restricciones para túneles de lavado. La capota de lona de 23,5 milímetros de espesor dispone de un aislamiento térmico excelente, clave de la idoneidad de la Clase E Cabrio para la circulación en invierno.