Como parte de la dominante actuación de Citroën Racing este año en el Rally de Alemania, Robert Kubica y Maciek Baran conseguían su tercera victoria en WRC2. Este primer éxito sobre asfalto coloca a los pilotos del DS3 RRC en cabeza de la clasificación del mundial.
El primer rally de esta temporada que se ha celebrado exclusivamente sobre asfalto, el Rally de Alemania, ha ofrecido a Robert Kubica otro reto. Tras ganar en Grecia y Cerdeña y terminar segundo en Finlandia, el polaco esperaba mantener la buena racha en su primera participación en este rally.
El rally empezaba el jueves por la tarde en Colonia. En las carreteras que llevaban a los equipos a Trier, dos tramos permitían establecer una primera clasificación. Robert Kubica marcó el mejor tiempo en ambas especiales, colocándose líder de su categoría, unos quince segundos por delante de Elfyn Evans. "No ha sido fácil, no esperaba que las condiciones fueran así," comentaba el piloto del DS3 RRC. Hacía frío y tenía problemas para mantener los neumáticos en la temperatura adecuada, así que el coche se deslizaba mucho".
El rally continuaba en la región de Trier al día siguiente, con tramos en las carreteras que serpentean por los viñedos del Mosel. Con problemas con el freno de mano durante todo el primer bucle, Robert Kubica se veía obligado a veces a poner marcha atrás para entrar en las curvas más cerradas. Aún así, consiguió mantener el liderato por unos segundos. El polaco logró ganar tres especiales por la tarde, a pesar de sufrir algunos incidentes más: "En la ES6, se rompió el spoiler y la ventanilla trasera. Lo reparamos en el siguiente tramo, pero nos olvidamos de cerrar bien el maletero y el siguiente tramo lo hice con el maletero abierto y oscilando. La ES8 fue bien, sin problemas".
El escenario cambió en el tercer día, cuando los viñedos dieron paso a las pistas de la región de Renania y al asfalto de la base militar de Baumholder. La jornada estuvo dominada por una emocionante batalla entre Robert Kubica y Elfyn Evans por el liderato del WRC2, que cambió de manos en nada menos que cuatro ocasiones. A pesar de la fuerte lluvia que empeoraba las condiciones, el piloto Citroën dijo la última palabra y entró en el parque cerrado con una ventaja de 7,8 segundos.
Solo quedaban dos tramos el domingo para separar a los dos rivales. Robert realizó un esfuerzo titánico en Dhrontal 1 que le permitió aumentar su ventaja a casi diez segundos. Sin embargo, la última especial no fue exactamente como estaba previsto: "Oímos un ruido de la transmisión y me preocupaba que se hubiera roto algo, pero por suerte estamos aquí y todo ha ido bien. Estoy satisfecho con el resultado, sobre todo porque hemos terminado quintos en la general. Ha sido una buena victoria porque Evans nos ha dado muchos problemas. Ahora vamos líderes del campeonato, pero mi principal objetivo es seguir aprendiendo en cada rally. La experiencia es la clave en WRC y cada tramo me da la oportunidad de mejorar".
Con cinco rallys a sus espaldas, el piloto del DS3 RRC tiene una ventaja de ocho puntos sobre Al Kuwari, que tiene el mismo número de resultados. "Robert sigue su programa de aprendizaje acelerado. Ha hecho una gran carrera. Aunque estaba bajo una presión constante, ha conseguido mantener su buena forma. Ahora está bien colocado para ganar el campeonato", destacaba Yves Matton, director del Citroën Racing Team.
Como no van a competir en el Rally de Australia, la próxima prueba para Robert Kubica y Maciek Baran será el Rally de Polonia (ERC), que tendrá lugar del 13 al 15 de septiembre. Volverán a la acción en el WRC para el Rally de Francia (3-6 de octubre).
| Fuente: Citroen
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