Los neumáticos ecológicos están de plena actualidad y la clave es el ahorro. Los números hablan: un automovilista que cubre alrededor de 15.000 kilómetros al año al volante de un familiar equipado con neumáticos tipo Eco economiza de 75 a 105 euros de carburante, es decir, algo más de un depósito completo cada doce meses. La razón es que los motores despliegan menos esfuerzos para mover un automóvil equipado con 4 neumáticos ecológicos que otro idéntico provisto de cubiertas convencionales, según explica Grupo Andrés, primer distribuidor exclusivo de neumáticos en España y Portugal.
Las nuevas cubiertas ecológicas son, además, más seguras que las tradicionales. Frenan mejor, ya sea en mojado o en seco, y ofrecen más adherencia en curva, según la experiencia de Grupo Andrés. Los neumáticos Eco-2 de Nankang, por ejemplo, detienen un turismo familiar de tipo medio en poco más de 22 metros cuando se frena a fondo a 70 por hora en carretera mojada, mientras que un neumático convencional necesita 25 metros para ese mismo ejercicio. La clave de esa eficacia está en los granos de sílice incorporados en los neumáticos que incrementan el área de contacto de la cubierta con el asfalto, reforzando el agarre al piso. Actúan como las "uñas de un felino", que están replegadas cuando el animal se mueve normalmente, pero arañan con fuerza ante cualquier emergencia, ofreciendo apoyo extra cuando ese mismo felino corre o realiza un movimiento difícil.
La rentabilidad de los neumáticos ecológicos más recientes se apoya en una tarifa inicial muy competitiva. Los precios de los Nankang Eco-2, por ejemplo, arrancan en 70 euros por unidad para cubiertas reservadas a llantas de 16 pulgadas. Un juego de neumáticos Eco se amortiza por completo en 3 años o 45.000 kilómetros.
Grupo Andrés propone, ahora mismo, 17 tipos diferentes de cubiertas Nankang Eco-2, para llantas de 15 a 19 pulgadas, y códigos de velocidad H, V, W e Y, es decir, capaces de soportar velocidades máximas que van desde 210 hasta 300 kilómetros por hora. Los precios de estos neumáticos ya montados van desde 70 hasta 106 euros.
La economía de marcha de un automóvil está directamente relacionada con sus cubiertas. Los neumáticos ecológicos de última generación, que combinan sílice y nuevos compuestos de goma, ofrecen mucha menos resistencia a la rodadura que los neumáticos convencionales. Eduardo Salazar, Director General de Grupo Andrés, lo resume así: "el turismo que se mueve sobre 4 neumáticos ecológicos del tipo Nankang Eco-2 exige menos esfuerzo a su motor, lo que rebaja el consumo entre un 3,9 y un 4,7 por ciento. El ahorro en gasóleo llega a superar los 200 euros cada 30.000 kilómetros, confirmando la rentabilidad de la inversión en cubiertas ecológicas". Grupo Andrés distribuye dos millones de neumáticos cada año a más de 10.000 talleres especializados de la Península Ibérica.
A esa rebaja en el gasto de carburante debe sumarse la economía asociada a una mayor vida útil de estas cubiertas ecológicas. "Este tipo de neumáticos está listo para cubrir, con plena seguridad, de un 15 a un 20 por ciento más de kilómetros que los neumáticos convencionales", según Eduardo Salazar.
Los Nankang Eco-2, distribuidos en exclusiva por Grupo Andrés, duran más de 45.000 kilómetros en condiciones óptimas de uso ya que la presión de contacto entre cubierta y piso, responsable del desgaste de la goma, se ha reducido de forma notable gracias a la estructura y a los compuestos especiales de estos neumáticos. Las cubiertas ecológicas ofrecen todas sus prestaciones a temperaturas más bajas que las convencionales, recortando así una de las causas principales de envejecimiento y desgaste.
Neumáticos ecológicos: seguridad en todas las circunstancias
La menor resistencia a la rodadura de los neumáticos ahorrativos se ha alcanzado sin comprometer su adherencia al asfalto en situaciones exigentes, como es la frenada sobre suelo mojado o sobre suelo seco, la circulación por curvas o el paso por charcos profundos.
La sílice, fundamental en una cubierta ecológica como la Eco-2, aumenta la superficie de contacto con el piso. Esa adherencia se percibe en una frenada en mojado, ya que la distancia de retención se recorta hasta en un 12 por ciento con respecto a una buena cubierta clásica. También se percibe en una frenada en seco, ya que el coche se "clava" en 21 metros frente a los 22,5 metros exigidos por unos neumáticos convencionales de categoría.
La referencia más reciente para el usuario sobre la eficacia de un neumático, la etiqueta europea, otorga una calificación B, un sobresaliente, a los Eco-2 por eficacia de frenada en mojado. Esa misma etiqueta califica a los nuevos Nankang con una C, notable alto, en cuanto se refiere a capacidad de ahorro por baja resistencia a la rodadura. El capítulo de ruido de funcionamiento se salda con 72 decibelios, que para el oído humano es justo la mitad del ruido emitido por un buen neumático convencional.
| Fuente: OAK POWER Comunicación / Grupo Andrés | Alcance: España
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