Renault le regala a los bomberos un Laguna desmontable


Tras el Twizy para apagar los incendios, Renault sigue haciendo bonitos regalos a los bomberos franceses: en éste caso se trata de un coche único, un Renault Laguna desmontable por piezas, que ha sido entregado a los bomberos de Les Yvelines (cerca de París), y cuyo fin es servir como coche para los bomberos en formación, de modo que lo puedan usar para practicar maniobras de rescate de emergencia, acceso a las víctimas y métodos de extracción.

El modelo de Laguna es un vehículo que se usa como prototipo, y que puede ser completamente desmontado y reutilizado. El fin lo explica muy bien Claire Petit Boulanger, responsable de seguridad de la división social corporativa de la marca francesa: "las maniobras para sacar a las víctimas requieren a menudo el corte de los coches usados en las pruebas, un proceso que es totalmente irreversible. Así que tuvimos la idea de diseñar un coche para la formación que fuera totalmente desmontable, y fácil de montar de nuevo".



El proyecto requirió la participación y el apoyo técnico de varios equipos de Renault, expertos en ingeniería de vehículos de prototipo, electricidad, carrocería, pintura y modelado, así como los de "mulas" de desarrollo, colaboraron en el cometido de llevar a buen puerto las especificaciones que los bomberos habían detallado. El fin era conseguir un coche que fuera completamente desmontable, y que se pudiera volver a montar sin herramientas. Además, era deseable también que pudiera ser movido fácilmente, y que los asientos fueran plenamente operativos, con respaldo extraíble.

Los equipos de desarrollo estuvieron a la altura y hoy, después de siete semanas de trabajo, entregaron el primer Laguna "en kit". Las piezas que no eran necesarias, como el motor, el depósito de combustible, los airbags y elementos accesorios, se han eliminado. El volante y la columna de dirección se pueden mover fácilmente para manejar y maniobrar el coche.


De acuerdo con las especificaciones, el Laguna se puede desmontar completamente en menos de cinco minutos. Este logro ha sido posible gracias al empleo de bisagras horizontales y verticales en el interior, permitiendo que las puertas y el maletero sean eliminados, y a conectores rápidos en el pilar central. También se han soldado conectores de caravana en el suelo para estabilizar el coche en todas las situaciones. Además, también se ha añadido un simulador de humo para que se pueda enseñar a los bomberos a apagar un incendio.




| Redacción: Revista Coche | Alcance: Francia

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