La productora de neumáticos Bridgestone ha elaborado una guía para los automovilistas para conducir, incluso en invierno, en condiciones de total seguridad. Las condiciones de frío, lluvia, nieve y hielo son de hecho condiciones que reduce drásticamente la adherencia entre los neumáticos y la superficie de la carretera. En estas situaciones, la primera regla de conducción es el sentido común, en forma de reducción de la velocidad, mayor atención a la conducción de los demás conductores.
Los sistemas electrónicos de seguridad instalados en los coches de última generación han aumentado el nivel de tracción y estabilidad, pero a veces no son suficientes para superar todos los obstáculos encontrados durante el invierno, especialmente si no se montan los neumáticos adecuados. La misma tracción 4x4, disponible ya para muchos coches y la mayoría de los SUV, mejora la tracción, pero sin los neumáticos de invierno hasta una pequeña rampa puede llegar a ser un obstáculo insuperable.
En clima frío, Bridgestone recomienda a los conductores revisar el estado de los limpiaparabrisas, la capacidad de la batería (el frío reduce su autonomía), la presencia de anticongelante (tanto en el radiador como en el liquido limpia parabrisas) para evitar daños si la temperatura cae por debajo de cero grados. Hay que comprobar además el estado de los neumáticos, su presión y la profundidad del dibujo.
Hay que tener cuidado también con la postura de conducción. No debemos estar demasiado lejos del volante para evitar retrasos en la respuesta de los brazos. Como tampoco hay que estar demasiado cerca del volante con los brazos pegados el cuerpo para vitar lo mismo. En el coche siempre que sea posible, es mejor levantar un poco el asiento para mejorar la visibilidad hacia el exterior y para evaluar mejor el estado de la carretera.
La conducción sobre nieve es extremadamente difícil y desafiante, por lo que es importante ser conscientes de sus limitaciones y ser capaz de predecir el comportamiento de otros conductores. Bridgestone propone: asegúrate de respetar una distancia segura entre usted y el vehículo delante de usted y en un tramo de carretera amplio y sin otros coches trata de frenar bruscamente con el fin de verificar las condiciones reales de la adherencia de las ruedas a la carretera.
Para una salida segura sobre fondo nevado hay que seguir dos consejos básicos:
1. Acelerar de forma más gradual para evitar el patinaje de las ruedas
2. Si las ruedas comienzan a deslizarse insertar la marcha superior: esto permite reducir la fuerza aplicada a las ruedas ayudando a restaurar la adhesión a la carretera. Para subir cuestas suele ser útil emplear una marcha superior a la que normalmente se utiliza en el asfalto seco.
Mientras que para frenar en toda seguridad sobre fondo nevado hay que respetar estas reglas:
1. Anticipar las frenadas tratando de evitar la intervención del ABS. Use el freno motor con cuidado de no soltar el embrague reducir la marcha bruscamente.
2. En caso de intervención de ABS con una vibración en el pedal del freno, no te asustes, mantén la presión sobre el pedal derecho.
3. Si no hay ABS, trata de no bloquear las ruedas ya que el bloqueo provoca una pérdida de control
4. Para disminuir el riesgo de bloqueo de las ruedas en bajadas (si no dispones de sistema electrónico anti-deslizante) utilizar una velocidad más baja que la que normalmente se utilizan en condiciones de asfalto seco.
5. Si el coche no tiene ABS en caso de bloqueo de las ruedas levanta el pie del pedal del freno para recuperar adherencia, y luego freno de nuevo suavemente varias veces.
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