Así de tajante ha sido Sebastian Guigues, director general de Renault Iberia. El poco apoyo, la poca infraestructura, y unas políticas conducentes a favorecer la movilidad con combustibles fósiles ahogan en España la poca esperanza que quedaba sobre el automóvil eléctrico.
Para Guigues, "los eléctricos claramente no están progresando en España al nivel que esperábamos. Iba a decir que nos gustaría, voy a utilizar mejor la palabra, que esperábamos. Creo que las razones son varias y esto como siempre es la opinión que tenemos en Renault. La primera es que ahora que todos los fabricantes tenemos coches eléctricos, que todos los españoles saben lo que es un coche eléctrico y cómo funciona, nos damos cuenta que los postes de recarga son escasos, los que funcionan. Ahí hay un primer freno, porque en una geografía como la española, donde te mueves entre Madrid, Barcelona, Bilbao o Sevilla tienes que hacer bastantes kilómetros, esto no es Luxemburgo, y lógicamente tienes ese miedo, a veces no tan justificado, a no tener una recarga a tiempo. La segunda es que hemos puesto unas ayudas muy consecuentes, hasta 7.000 euros, es una gran ayuda, pero son muy complicadas de cobrar. Si yo me compro un Renault Megane eléctrico, un gran coche, por cierto, si todo va genial cobraré esos 7.000 euros, si tengo derecho a ello, un año después. Es decir, que pase lo que pase, para comprarme un Megane eléctrico necesito tener la tesorería o un banco que me preste el importe íntegro del coche. Otro problema es que estamos planteando como única solución la avalada por los gobiernos y los políticos para renovar coches viejos. Estamos obligando a alguien que tiene un coche de 14, 15, 16 o 20 años a vender su coche por cero euros para que compre un coche nuevo eléctrico que es buenísimo y que vale 45, 50 o 55 mil euros. Se me antoja que la persona que tiene un coche de veinte años, al margen de coleccionistas, lo normal es que tenga ese coche porque no puede tener uno nuevo. Y si además de nuevo se lo tiene que comprar eléctrico, es decir, 45 mil euros, pues se le hace muy cuesta arriba".
Más claro, agua. Políticos, póngase las pilas que para algo les pagamos multimillonarios sueldos.