En el segmento C europeo, la competencia es feroz. Anualmente se venden unos 3 millones de unidades y los coches tienen que ser algo más que "únicos". Es un segmento donde ser bueno no es suficiente.
Tomando como base su exitoso predecesor, los diseñadores del nuevo Mazda3 se propusieron nada menos que crear un coche que interaccionase a varios niveles con su propietario. A primera vista, el Mazda3 es un turismo de alta calidad, con una combinación imbatible de prestaciones, eficiencia de consumo y funcionalidad. En pocas palabras, una propuesta segura, práctica y deslumbrante. Hasta aquí, sigue las huellas de los demás modelos de nueva generación de la marca: el Mazda CX-5, un SUV compacto con la conducción de una berlina, y el nuevo Mazda6, que ha llegado con mucha fuerza al segmento de berlinas medias.
Al igual que ellos, el Mazda3 -el modelo de la marca más vendido de todos los tiempos- incorpora la tecnología SKYACTIV. Y también reinterpreta el diseño KODO adaptado al tamaño y la agilidad propios de un compacto. Pero hay mucho más fuera de lo evidente: es un vehículo que cautiva los sentidos, creando vínculos entre la persona y la máquina.
Y esos vínculos no hacen sino volverse más estrechos, porque el Mazda3 supera las expectativas a cada instante. Desde la forma en que se abren las puertas hasta el hecho de que los mandos estén exactamente en el lugar adecuado. Su nuevo interior conecta a los ocupantes con el coche; lo mismo al conductor, que percibe esa típica experiencia de fusión con su vehículo que Mazda llama Jinbai Ittai, que a los pasajeros, que disfrutan del viaje en una relajada atmósfera de seguridad y confort.
Como un verdadero compañero, el nuevo Mazda3 inspira vitalidad y llama a ampliar los horizontes. Solo hay que fijarse en la facilidad de manejo, en cómo responde a las órdenes del conductor, en cómo toma las curvas y en la precisión de su tacto. Incluso conecta a sus ocupantes con el ciberespacio gracias a un nuevo concepto de conectividad móvil, que introduce en el vehículo de forma segura y práctica cosas que ya forman parte de nuestra vida cotidiana.
Todo ello forma parte del Zoom-Zoom sostenible, la visión de unos vehículos más seguros y respetuosos con el medio ambiente que Mazda está haciendo realidad. Con emisiones excepcionalmente bajas, para disfrutar de la conducción sin remordimientos. Pero es que, además, el Mazda3 está entre lo mejor de su clase en muchos otros parámetros, desde el espacio interior y la aerodinámica hasta la aceleración o los frenos.
El diseño inteligente y las sofisticadas posibilidades de interacción acentúan lo mejor del nuevo Mazda3. Es un coche que no deja de fascinar.
Diseño exterior
Tentación. Una mirada al nuevo Mazda3 basta para despertar emociones y captar la atención del observador antes de cautivarlo por completo. Atrapa, se mete bajo la piel. Crea una conexión que se convierte en la semilla de una larga relación.
Detrás de ese magnetismo está el diseño "KODO, alma del movimiento". KODO es un lenguaje inspirado en la belleza y la fuerza de la naturaleza, creado por Mazda para llevar un paso más allá su exclusivo sentido de la vitalidad y la agilidad. Objetivo: dar forma a una nueva generación de coches perfectos para conducir.
Capturar la emoción
Aunque el Mazda3 siempre ha recibido numerosos elogios y siempre ha sido indiscutiblemente Mazda, en esta nueva versión se han replanteado a fondo muchas cosas. Mazda ha conseguido expresar el movimiento dinámico de una manera genuina y llena de pasión, adaptando el atrevimiento del lenguaje KODO a la fuerza y la energía del segmento C. Al igual que los anteriores modelos KODO, el nuevo Mazda3 se caracteriza por una planta firme, enfatizada por la cabina, de aspecto compacto y desplazada hacia atrás. El perfil inclinado del coche, que es más bajo y más ancho que el modelo actual, se eleva llamativamente hacia la parte trasera y se reafirma con unos pasos de rueda muy prominentes. Al mismo tiempo, las llantas de aluminio transmiten sensaciones de agilidad y fuerza. Y también está, por supuesto, esa potencia tan característica de Mazda.
Desde el primer instante, el nuevo Mazda3 enciende una chispa en el corazón del observador y despierta la imaginación, que fabula nuevas posibilidades. La energía en tensión se une a una sensación de ritmo seductora y gratamente original. Los reflejos de las texturas brillantes de las superficies cambian como el estado de ánimo, dependiendo de la iluminación y del punto de vista del observador, algunas veces de forma sutil, otras más llamativamente, pero siempre capturando los sentidos y alegrando el espíritu.
Calidad en los detalles
Esto es solo un ejemplo del cuidado por los acabados y la atención minuciosa por el detalle que ha desplegado en este coche. Una de las prioridades de Mazda era conseguir un nuevo nivel de precisión y calidad en el montaje y los acabados. Por eso, la marca formó un equipo de especialistas en diseño, desarrollo y fabricación, y le encomendó la misión de encontrar maneras de mejorar el placer de conducción y la satisfacción de ser dueño del nuevo Mazda3.
Por ejemplo, para minimizar las holguras entre los paneles de la carrocería y las puertas se estudiaron todos los aspectos, desde la forma de sujetar las puertas a las bisagras hasta las tolerancias de grosor de la pintura en las aristas de los paneles. Mazda miró con otros ojos el potencial de mejora y se fijó nuevos y ambiciosos objetivos. Como resultado, la holgura entre la puerta delantera y la aleta, que suele ser más pronunciada, es ahora más reducida en el Mazda3 que en muchos modelos de lujo.
Tensión con ritmo
Al igual que sus hermanos de gama, el nuevo Mazda3 luce el estilo distintivo KODO, con la parrilla delantera en forma de ala. Esta última surge desde la parte inferior y alcanza los grupos ópticos, que brillan como los ojos de un depredador al acecho. Los faros del Mazda3 son muy característicos. Para hacer posible una forma nítida y elegante y una estructura muy limpia, los intermitentes se han situado fuera del grupo óptico. Ahora utiliza lámparas led, lentes internas y un haz luminoso circular. Llama la atención y trae a la mente inmediatamente el nombre de Mazda.
KODO es sinónimo de movimiento y se expresa en el nuevo Mazda3 mediante un evidente flujo rítmico de sus líneas de carácter, sólidas y sencillas. Fluyen hacia atrás, desde la parrilla en forma de ala y los faros a lo largo de los laterales del coche, dando continuidad a las aletas y subrayando la agilidad del vehículo. En combinación con el efecto óptico que produce el centro de gravedad a baja altura del coche, estas formas, transmiten una sensación de energía contenida que crea expectativas sobre las prestaciones del coche, incluso cuando está parado. La distancia entre ejes más grande -60 mm mayor que la del actual Mazda3- ha permitido a los diseñadores acortar los voladizos delantero y trasero para obtener una planta de mayor inspiración KODO. Al mismo tiempo, hay más espacio para el motor y hasta han mejorado la seguridad en caso de impacto.
La sección trasera del Mazda3 tiene muchos paralelismos con la delantera. Al igual que la parrilla, el sólido portón trasero parece sobresalir. Los pilotos traseros, como los delanteros, se caracterizan por unas ópticas circulares y deportivas con un acabado interior de alta calidad en dos tonos que producen la sensación de desvanecerse en la distancia.
Extraordinariamente preciso
A estas alturas, el observador ya tendrá unas ganas enormes de ponerse al volante del nuevo Mazda3. Cuando lo haga, tendrá su primer contacto físico con el coche: una experiencia sorprendentemente agradable en sí misma. Porque en su obsesión por la calidad, los diseñadores analizaron al detalle cómo interaccionan las personas con las puertas. Por eso han suavizado las bisagras y el momento de inercia, consiguiendo una apertura lo más natural posible. Abrir y cerrar las puertas del nuevo Mazda3 es un proceso muy suave y lineal, del que se ha excluido esa sensación normal de "peso". Junto con el buen aspecto, esta especie de extraordinaria minuciosidad sirve de hilo conductor al proceso de identificación que los propietarios experimentarán con su nuevo Mazda3. Todo empieza cuando ponen su mirada por primera vez en el coche. Cuando entran dentro, el proceso ya es irreversible.
Los colores SKYACTIV
El nuevo Mazda3 está disponible en nueve colores de carrocería. Para celebrar su llegada al universo KODO, uno de ellos es el Soul Red Metallic, quizás el tono de rojo más emocional que se haya creado hasta la fecha, y dos colores totalmente novedosos en Mazda: el Titanium Flash, de sofisticada personalidad, y el Deep Crystal Blue, con un tinte inspirado en la potencia y la velocidad de un rayo que atraviesa un cielo oscuro. El nuevo compacto de Mazda también está disponible en Blue Reflex, Snowflake White Pearl, Aluminium Metallic, Meteor Gray, Jet Black y Arctic White.
"En esencia, KODO expresa movimiento dinámico en cada detalle, desde el bastidor a todo lo demás. Por eso aporta un atractivo muy peculiar a cada modelo de Mazda. Tal y como se ha aplicado al nuevo Mazda3, el diseño KODO simboliza una fuerza que enciende una chispa en el corazón a primera vista y que deja apenas entrever un futuro de nuevas experiencias."
Koji Tabata, diseñador jefe del nuevo Mazda3
Confort interior
Si la carrocería del nuevo Mazda3 crea expectativas en cuanto al interior, es obligado que el interior las supere. Abrir la puerta es como abrir un cofre del tesoro repleto de refinado confort y ergonomía, con el encanto seductor de superficies que invitan a tocarlas, con la sofisticada nitidez y la coherencia de un espacio que ha sido diseñado pensando más que nunca en las personas.
Esta primera impresión no decepciona. Este interior, fresco y acertado, se empleará en todos los futuros Mazda de nueva generación a partir del nuevo Mazda3 y sigue un nuevo concepto revolucionario: separación y unificación. En otras palabras, el habitáculo está dividido en zonas; para empezar, una para el conductor, acogedora y autónoma en el sentido de que todo está situado para producir una experiencia de conducción segura, agradable y libre de estrés. El espacio para los pasajeros, por el contrario, ofrece un ambiente tranquilizador, abierto, espacioso y relajante.
La zona del conductor, que converge en el centro, contrasta con el salpicadero del lado del acompañante, relativamente bajo, que produce sensaciones simultáneas de libertad y seguridad. La consola central asimétrica señala la frontera entre las dos zonas, delimitando sus respectivos atributos. Pero, al mismo tiempo, crea una sensación de conexión al unir las dos zonas, estableciendo una especie de equilibrio entre el conductor y el acompañante, que pueden compartir sus experiencias: el placer de conducir o un viaje seguro y relajante. Como ocurre con todo el diseño Zoom-Zoom, todas las formas del habitáculo miran hacia adelante. Los orígenes de las formas parecen fluir hacia el interior desde un teórico punto de fuga situado ante el coche, lo que intensifica la sensación de movimiento y velocidad, incluso con el coche parado.
Perspectiva unificadora
El espacio del conductor es, verdaderamente, el cockpit de un piloto. Sus líneas poderosas y su diseño ergonómico ayudan al conductor a concentrarse sin esfuerzo en la carretera. De forma muy oportuna, el elemento más novedoso se tomó prestado de los cazas de combate. El nuevo Mazda3 es uno de los primeros modelos del segmento C que incorpora el head-up display. Esta pantalla presenta la información más importante para el conductor, como velocidad y alertas del sistema de seguridad activa, directamente en la línea visual del conductor (ver capítulo 5 para más detalles).
Los conductores reaccionan de forma óptima cuando se sienten cómodos. Por eso Mazda ha situado los controles necesarios para manejar directamente el vehículo manteniendo los ángulos naturales y una postura relajada. Los mandos parecen extensiones de las extremidades. Por ejemplo, la posición del volante es más baja que en el modelo actual y acerca el coche al conductor, mientras que los pedales están colocados simétricamente a la derecha e izquierda del eje central del conductor, en las posiciones más óptimas. Por su parte, la palanca de cambios se ajusta a la palma de la mano como un guante. Todo ello contribuye a reducir la tensión del conductor y, con ello, evita la fatiga.
Como se ha mencionado anteriormente, el habitáculo desplazado hacia atrás es una de las señas de identidad del diseño KODO. En concreto, los pilares A del nuevo Mazda3 han sido desplazados 100 mm hacia atrás. Esta modificación mejora la visibilidad frontal y proporciona un campo de visión magnífico. Junto con los retrovisores laterales, que también se han reubicado, esta nueva disposición reduce el potencial de tensión para el conductor, especialmente en los cruces y giros. Incluso se han estudiado los puntos de visión para hacer ajustes de precisión en la forma y el grosor de los pilares A, de forma que no tengan un efecto agobiante para los ocupantes de las plazas delanteras.
Tiempo para el confort
He aquí un ejemplo de cómo el exterior compacto KODO conlleva ventajas para el interior: el aumento en la anchura y en la distancia entre ejes del nuevo Mazda3 -que ahora es la mayor del segmento- ha dado a Mazda material para trabajar. Ahora, tanto el 5 puertas como el SportSedan son líderes en su clase en cuanto a espacio para los hombros en las plazas delanteras y traseras; también son de los mejores en la cota de espacio para las piernas. El interior es más amplio y confortable que el de su antecesor en la mayoría de medidas, desde el espacio para los pies al espacio para las rodillas, entre otras. Asimismo, Mazda ha sabido mantener el espacio para la cabeza, a pesar de la reducción de 25 mm en la altura general del coche. Para ello, ha rebajado el punto H de los asientos.
El asiento de conductor puede regularse longitudinalmente 260 mm. El ángulo de inclinación tiene un ajuste de 102° y el ajuste vertical es de 56 mm, incluida una regulación descendente de 20 mm para los conductores de mayor estatura. Mazda ha buscado los fundamentos y ofrece unos asientos que envuelven a los ocupantes, proporcionándoles una posición natural con buen apoyo y una sujeción magnífica.
Los respaldos se han mejorado para eliminar mejor las vibraciones. También tienen una zona para los hombros más amplia y una banqueta más grande que, en lo estético, complementan la solidez y el estilo nítido y deportivo del interior. Pero es que, además, son más esbeltos que antes y poseen una forma cóncava en los respaldos, lo cual deja más espacio para las rodillas de los pasajeros de las plazas traseras. Y también para los pies, porque los anclajes de los asientos están ahora más separados entre sí. Sin duda hay una sensación de más espacio en la segunda fila de asientos gracias a los reposacabezas más estrechos y a las secciones para los hombros, así como a unas ventanillas traseras más amplias. También influye el hecho de que los asientos traseros están más cerca del centro del vehículo. Los ocupantes de las plazas traseras tienen, en definitiva, una mejor visión del mundo. En cuanto a la tapicería, el Mazda3 está disponible en piel negra con costuras rojas o en combinación con un tono marfil con costuras blancas, grises y rojas. También hay disponible una versión de tapicería de tela negra.
Funcional y con gusto
En línea con la mayor sensación de espacio, el lado del acompañante delantero está rematado con un panel decorativo horizontal que sirve para "agrandar" el espacio. Las líneas virtuales del salpicadero se alargan hasta las armoniosas salidas de aire laterales y hasta los tiradores de las puertas, llegando a las proximidades de los pilares B. De este modo, se acentúa la sensación de pureza y uniformidad del diseño del habitáculo. La consola central también ofrece un diseño sencillo y funcional. Los mandos de climatización, que están situados debajo de las salidas de ventilación centrales, poseen un elegante aspecto tridimensional, con mandos circulares. En la parte superior del salpicadero, tanto el conductor como el acompañante pueden acceder cómodamente a la pantalla táctil de 7 pulgadas; en el caso del conductor, sin distraerse de la conducción.
En general, los acabados interiores son al mismo tiempo emocionales y con estilo, añadiendo una cierta lógica al habitáculo, en especial en relación con los distintos controles y las zonas que los rodean. El carácter deportivo del color negro dominante se refuerza por medio de contrastes que intensifican la sensación de calidad, como las superficies en fibra de carbono o el volante de cuero negro con freno de mano a juego, los reposabrazos o la palanca de cambios. Este tipo de combinaciones o las superficies en un elegante color negro piano junto a los elementos cromados confieren un aspecto de sofisticación juvenil.
Racional, equilibrado y armónico, el habitáculo del nuevo Mazda3 es un espacio extraordinariamente refinado, en el que la atención al detalle es tan meticulosa como en el resto del vehículo. Va a ser difícil superarlo.
Almacenamiento práctico
Tanto en carrocería SportSedan como en 5 puertas, el maletero del nuevo Mazda3 ofrece un cómodo acceso y capacidades de 419 y 350 litros respectivamente (en ambos casos, más que el modelo actual). Con los asientos traseros abatidos, el 5 puertas tiene una capacidad de 1.250 litros, mientras que el maletero del SportSedan es ahora 100 mm más ancho, lo que le permite almacenar tres maletas de 67 cm.
Los diferentes espacios de almacenamiento del habitáculo se han diseñado pensando en las distintas zonas interiores. Permiten a los ocupantes y especialmente al conductor acceder a los artículos desviando mínimamente la vista. Por ejemplo, en la sección delantera hay una gran espacio de almacenamiento debajo de la consola central, bolsillos en las puertas con espacio para botellas de 1 litro y un soporte para gafas en la consola superior. Los pasajeros de las plazas delanteras y traseras disponen también de posavasos en la consola central o en el reposabrazos.
Conectividad, funcionalidad y equipamiento: Sin concesiones
Aquí es donde el nuevo Mazda3 te parecerá de verdad irresistible. En sintonía con las demandas de la vida actual, Mazda ha dado grandes pasos para completar la experiencia de conducción. Porque la forma en que vemos nuestros coches está cambiando drásticamente.
Lo cierto es que, con toda la funcionalidad de los coches de hoy en día, los conductores tienen que lidiar con más información que nunca. Mazda, que siempre procura proporcionar una experiencia de conducción lo más grata posible, lo sabe perfectamente. Sus diseñadores comprendieron que era necesario crear un nuevo concepto de cabina, para que los conductores puedan procesar toda esa información de forma segura y explotar las ventajas de unos sistemas de a bordo que son cada vez más sofisticados.
Aliviar la tensión
El objetivo de Mazda: conseguir en el habitáculo mayor interactividad y conectividad que nunca, pero que al mismo tiempo resulten muy prácticas y seguras de usar. Para lograrlo, era preciso minimizar el peligro que surge de la falta de atención a la carretera, las distracciones y el estrés físico. Su propuesta fue una nueva interfaz hombre-máquina (HMI) para el nuevo Mazda3, con un juego innovador de controles y pantallas.
La información más importante se presenta de forma que el conductor pueda leerla con unos movimientos oculares mínimos. Al igual que los espacios separados para el conductor y los pasajeros de los que habla el capítulo 4, este concepto distingue entre una zona de conducción segura y una zona de información y entretenimiento. Los distintos controles siguen este planteamiento, con un diseño coherente y una distribución por zonas que diferencia sus respectivas funciones.
Mazda desarrolló modelos mentales intuitivos que reflejaban cómo esperan los usuarios que funcionen los controles y pantallas, con el fin de crear un ambiente que permita a los conductores decidir y actuar sin dudar un instante. Por tanto, el espacio del conductor está pensado para facilitar reacciones precisas con el mínimo esfuerzo y sin movimientos innecesarios, permitiéndole mantener una postura estable y a la vez permanecer relajado y alerta, incluso en los viajes largos. Lógicamente, los mandos y controles que se usan con más frecuencia, incluidos los necesarios para la conducción del vehículo, se encuentran en el volante. En cambio, los asociados a funciones de información y entretenimiento se han ubicado en otras zonas.
Adiós a la confusión
La información sobre conducción en tiempo real, tales como velocidad, indicaciones del navegador y estado de los sistemas de seguridad activos i-ACTIVSENSE (alertas incluidas), se muestra en el head-up display. Esta pantalla es una de las primeras que se montan en un vehículo de este segmento. Consiste en un panel situado en el salpicadero, justo encima del cuadro de instrumentos. El sistema, que ajusta automáticamente su brillo en función de la luz ambiental, presenta información con un punto focal más o menos 1,5 m por delante del punto de vista del conductor, con lo que minimiza los ajustes de enfoque y el movimiento ocular. Para evitar confusión, en el head-up display solo aparecen tres datos simultáneamente. El dato más relevante es siempre el que aparece más arriba y va cambiando según el nivel de prioridad. Por ejemplo, una alerta de seguridad activa urgente desplaza inmediatamente cualquier información que esté destacada (por ejemplo, la velocidad actual del vehículo) y vuelve a cambiar de nuevo cuando el peligro ha pasado.
El resto de la información relacionada con la conducción se encuentra en el panel de instrumentos, que se ha rediseñado por completo para el nuevo Mazda3. Incluye un tacómetro analógico central con un velocímetro digital flanqueado por dos pantallas digitales con forma de ala. Estas pantallas muestran datos de temperatura, nivel de combustible, información sobre el cambio de marchas y odómetros.
La información relacionada con las comunicaciones y el entretenimiento aparece en la nueva pantalla de 7 pulgadas, que se controla de forma táctil, mediante comandos de voz o con el nuevo mando giratorio HMI commander. Esta pantalla está situada en la parte superior del salpicadero, justo encima de la consola central. En esta nueva ubicación, el conductor tiene que bajar la vista 16° para consultarla, en vez de los 28° del actual Mazda3. De esta forma, la pantalla distrae menos al conductor y, de paso, el acompañante puede verla y utilizarla con más facilidad. Además, los menús llevan de forma más directa a todas las operaciones; por ejemplo, introducir un destino en el navegador, buscar música para el sistema de sonido envolvente Bose (ver cuadro) o consultar los últimos mensajes de Facebook. Los usuarios también pueden establecer accesos directos a sus funciones favoritas. En cualquier caso, solo aparecen en la pantalla a la vez "7 ± 2" elementos, el máximo que pueden manejar las personas simultáneamente según los psicólogos.
La seguridad, lo primero
Mazda también ha rediseñado el mando giratorio HMI commander situado en la consola central para mejorar el manejo "a ciegas" de las funciones de información y entretenimiento. Ahora está situado de forma que el conductor solo tiene que apartar una mano del volante y sujetar el dial con un movimiento natural, que no requiere esfuerzo ni cambio de postura. El nuevo mando está rodeado por cinco botones, uno por cada dedo, cada uno de los cuales corresponde a una función específica: navegador, inicio y sistema de audio en el centro, y "volver" y "favoritos" a los lados. También hay un control de volumen cerca del mando. Es posible acceder a todos los controles con el codo cómodamente apoyado en el reposabrazos.
El control por voz es otra alternativa segura y ergonómica para manejar las funciones de información y entretenimiento, y permite cambiar de menú y seleccionar emisoras de radio, reproducir/detener/saltar pistas de música, o acercar y alejar la ruta en el mapa del navegador. Además, cuando hay un smartphone o un reproductor de música conectado, los ocupantes pueden buscar música o nombres de la agenda, o introducir direcciones en el navegador mediante voz.
Conectividad sin interrupciones
Las tecnologías móviles como los smartphones han cambiado nuestro estilo de vida de forma irreversible. Las redes sociales también han transformado la forma en que las personas acceden a la cultura. Mazda ha introducido esta nueva realidad en el Mazda3, con un novedoso concepto de conectividad móvil.
Este sistema de a bordo amplía las funciones que ya estaban disponibles en los vehículos de la marca, como Bluetooth, correo electrónico, SMS y navegación. En pocas palabras, abre una nueva dimensión a la conectividad. Mediante un smartphone conectado al sistema del Mazda3 por Bluetooth o USB, los ocupantes del vehículo tienen acceso en tiempo real, de forma fácil y segura, a los servicios de información y entretenimiento de AhaTM a través de la pantalla de 7 pulgadas (ver cuadro). Esta plataforma ofrece una amplia gama de contenidos de información y entretenimiento, además de servicios de redes sociales, decenas de miles de emisoras de radio a través Internet, feeds de Twitter y Facebook, noticias, audiolibros y mucho más.
Se pueden incluso escuchar los últimos tweets o mensajes de Facebook utilizando la función de lectura, contestar con un "me gusta" o publicar mensajes de audio mediante una función de voz. También es posible enviar y recibir correos electrónicos y mensajes de texto, viendo en pantalla la identidad del remitente. De nuevo, se puede utilizar la función de lectura, así como funciones de edición en pantalla y respuesta. El sistema de conectividad también soporta la reproducción desde otros dispositivos móviles conectados y funciona con 25 idiomas de audio y 38 de texto. Para conectarse se puede emplear un hub externo con puertos USB y AUX o la ranura para tarjetas SD del navegador. El hub multiusos está situado en la consola central o, en los modelos con reproductor de CD, en la caja de la parte posterior de la consola central. En cualquiera de los dos lugares hay espacios para guardar los dispositivos móviles.
Además, el concepto de conectividad móvil desarrollado por Mazda ofrece una amplia variedad de información sobre el vehículo desde las propias aplicaciones Mazda. Por ejemplo, recordatorios sobre el mantenimiento, alertas y una pantalla ecológica. Esta última muestra el estado y las medias de actividad del freno regenerativo i-Eloop y del sistema de corte de ralentí i-stop, además del consumo de combustible y las emisiones de CO2, para que los conductores lleven un seguimiento de su evolución y de cualquier cambio.
En línea con el mundo de hoy
Para ampliar la experiencia de conducción, Mazda ha conectado al conductor, a los pasajeros y al propio vehículo con el mundo interactivo actual, de una forma segura y eficiente. Y al mismo tiempo, también conecta a los ocupantes con el nuevo Mazda3, fortaleciendo aún más ese vínculo cada vez más intenso entre las personas y el vehículo. Y ese no es el único modo en que Mazda profundiza en el Mazda3 en esa sensación de fusión entre el conductor y su vehículo, o Jinba Ittai.
AhaTM: integración de contenidos
AhaTM es una plataforma en la nube de conectividad a Internet pensada para automóviles. Disponible por primera vez en Mazda con el nuevo Mazda3, AhaTM funciona como punto único de integración para acceder desde el vehículo una amplia gama de contenidos de información y entretenimiento gratuitos, basados en Internet.
Utiliza un formato de sonido similar al de la radio y su objetivo es que acceder a los contenidos sea tan sencillo como manejar la radio de un coche, de manera que el uso de los contenidos de información y ocio de Internet resulte seguro en los vehículos. AhaTM permite al usuario acceder y organizar sus contenidos web favoritos desde su teléfono y después integra de forma fluida la experiencia en el coche. En el nuevo Mazda3 se puede acceder a AhaTM mediante una aplicación gratuita para smartphones con cobertura en prácticamente toda Europa.
El contenido gratuito consiste actualmente en más de 30.000 emisoras incluyendo radio, podcasts, redes sociales, audiolibros, servicios personalizados de localización, etc. Los servicios aumentan día a día. Y como todas las actualizaciones del sistema se producen a través de la nube, la plataforma no tiene fecha de caducidad y ofrece una simplicidad máxima tanto para el coche como para el usuario.
Sistema de navegación del Mazda3
El sistema de navegación del nuevo Mazda3 ayuda a los conductores a alcanzar su destino de forma segura, con menos estrés y mejor informados, con distintas funciones que elevan la comodidad.
Características principales:
- Más seguro, sencillo y relajado para el conductor, dado que cada instrucción de ruta se muestra tanto en el Head up display como en la pantalla de la consola central.
- Información en tiempo real a través de RDS-TMC, junto con datos estadísticos sobre congestión del tráfico almacenados en los mapas, y la información de tráfico más reciente disponible. Todo con el fin de hacer cálculos de ruta más precisos.
- Búsqueda de destinos, estaciones de servicio, puntos de interés y previsiones meteorológicas:
-- Accede a los precios actuales de combustible vía on line y permite a los conductores elegir estaciones de servicio como punto de destino.
-- Muestra las últimas previsiones y el tiempo actual en cualquier lugar por el que transcurre la ruta.
-- También es posible buscar un destino en Internet mediante un smartphone, o programar destinos desde una lista de contactos de un móvil.
- Disponible en toda Europa. Los datos de mapas incluidos en la tarjeta SD del sistema de navegación incluyen:
-- Tres años de actualizaciones gratuitas (mapas y direcciones) transferibles mediante la tarjeta SD.
-- Compatible hasta con 18 idiomas en audio y 26 en texto.
(La disponibilidad y las tarifas pueden variar según el país).
Sonido envolvente de primera calidad de la mano de Bose
Desarrollado en colaboración con Bose y especialmente para el nuevo Mazda3, el nuevo equipo de sonido premium Bose de 9 altavoces ofrece lo último en tecnologías de reproducción y, por supuesto, potencia a raudales. Con el mismo espíritu perfeccionista que la tecnología SKYACTIV del nuevo Mazda3, el sistema ofrece las funciones de sonido más avanzadas y, sin embargo, pesa un 20% menos y es más eficiente que su predecesor. Por ejemplo, como el amplificador genera menos calor, no requiere grandes aletas metálicas de refrigeración. Así que es más ligero y más pequeño, pero sin pérdida alguna de rendimiento.
El sistema de audio utiliza procesamiento de señal digital Centerpoint 2, que analiza la frecuencia de la fuente del sonido y proporciona una rica experiencia virtual de sonido envolvente multicanal, incluso desde MP3 u otros archivos comprimidos, y también para los contenidos de audio y de radio accesibles mediante el nuevo sistema de conectividad móvil. El Mazda3 supone el lanzamiento de Centerpoint 2 en el segmento C. Además, la tecnología de compensación de ruido AudioPilot 2 compensa los efectos de sonidos indeseables producidos por distintos tipos de firme, cambios de velocidad e incluso por ventanillas abiertas. Utiliza un micrófono montado en el habitáculo que controla el nivel de ruido ambiente y reajusta automáticamente la señal de la música, de forma que el conductor pueda concentrarse en la carretera.
Distribución de los 9 altavoces de altas prestaciones con amplificador digital:
- 1 altavoz de medios/agudos Twiddler de neodimio, de 8 cm, en el panel de instrumentos.
- 2 altavoces de medios/agudos Twiddler de neodimio, de 6 cm, en el panel de instrumentos.
- 2 altavoces de graves de 23 cm Nd en las puertas delanteras.
- 2 altavoces de rango completo, de 13 cm, en las puertas traseras.
- 2 altavoces de medios/agudos Twiddler, de 6 cm, situados en la bandeja trasera (SportSedan) o en los paneles laterales traseros (5 puertas).
- Amplificador digital con procesamiento de señal digital Bose:
-- 8 canales de ecualización personalizada.
-- Tecnología de compensación de ruido AudioPilot 2 con micrófono en el habitáculo.
-- Procesamiento de señal Centerpoint 2.
-- Procesamiento de señal SurroundStage.
(La disponibilidad varía según el paquete de equipamiento).
Cadenas cinemáticas: Los corazones que laten en el interior
Cuando se abre la puerta del nuevo Mazda3 empiezan a ocurrir cosas emocionantes. El coche empieza a despertarse. Al sentarse al volante se empieza a sentir el latido, en forma de un anillo rojo parpadeante en el cuadro de instrumentos. Al encender el motor las agujas, los indicadores y los demás instrumentos se iluminan. A continuación, el head up display se abre hasta ponerse en posición y finaliza la secuencia de arranque. El nuevo Mazda3 está listo. Es la hora de la aventura.
La siguiente -y grata- sorpresa viene enseguida, y consiste en descubrir cómo responde el nuevo Mazda3 a la presión del pie del conductor sobre el acelerador: con absoluta precisión, gracias a las últimas mejoras en el control del pedal. Dicho control permite al conductor aplicar la presión que corresponde exactamente a la aceleración que desea, y también facilita las reducciones de marcha con cambio automático. El motor responde a la presión del pedal de forma sincronizada, con un agradable sonido proporcional a la respuesta del acelerador. "Conocer" y controlar el coche tan rápidamente es una experiencia muy gratificante.
Control satisfactorio
La gama de motorizaciones está compuesta por tres propulsores atmosféricos de gasolina y un turbodiésel. Entre los gasolina, llama la atención el nuevo SKYACTIV-G 1.5 litros, un motor altamente eficiente y que ofrece un consumo de tan solo 5,0 l/100 km (ciclo combinado), que se complementa con el cambio manual de seis velocidades SKYACTIV-MT. Las emisiones de CO2 de este motor SKYACTIV-G apenas alcanzan los 118 g/km. Esto supone un 18% menos que el motor 1.6 l. al que sustituye, gracias a características exclusivas SKYACTIV, que implican un diseño más ligero, una elevada relación de compresión de 14:1, un sistema de escape 4-2-1 de colectores largos y el sistema de corte de ralentí de Mazda i-stop, todo ello de serie en el nuevo Mazda3 (ver cuadros).
Al mismo tiempo, el SKYACTIV-G 1.5 l. desarrolla un par más alto (150 Nm a 4000 rpm) que el motor 1.6 l. actual, con una entrega más lineal desde revoluciones más bajas. Con una potencia de 74 kW / 100 CV a 6000 rpm, pasa de 0 a 100 en 10,7 segundos y alcanza una velocidad máxima de 185 km/h.
El nuevo Mazda3 también se presenta en dos motorizaciones SKYACTIV-G de 2,0 litros. La versión de 165 CV desarrolla 121 kW / 165 CV a 6000 rpm y 210 Nm a 4000 rpm. Se encuentra disponible para el 5 puertas con cambio manual e i-Eloop o freno regenerativo de Mazda (ver cuadro). Pasa de 0 a 100 en 8,2 segundos y alcanza una velocidad punta de 210 km/h. El consumo de combustible y las emisiones de CO2 (5,8 l/100 km y 135 g/km) resultan muy comedidas para semejantes prestaciones y, en todo caso, se han rebajado también en un 14% con respecto a su predecesor, el motor 2.0 l. DISI i-stop, a pesar de generar un 10% más de potencia y par.
Potencia para moverse
Por su parte, el motor SKYACTIV-G 2.0 l. de 120 CV (ver cuadro) desarrolla 88 kW / 120 CV a 6000 rpm y, como su hermano mayor, 210 Nm a 4000 rpm. Disponible para las dos carrocerías y con transmisión SKYACTIV-Drive automática o SKYACTIV-MT manual, esta opción combina consumos ajustados y emisiones de CO2 de primer nivel -5,1 l/100 km y 119 g/km (transmisión manual) y 5,6 l/100 km y 128 g/km (transmisión automática)- con unas prestaciones de 0 a 100 en 8,8 y 10,3 segundos, respectivamente, y velocidad punta de 198 km/h.
El motor diésel limpio SKYACTIV-D también emplea una compresión extremadamente baja y un diseño ligero para ofrecer potencia y alta eficiencia de combustible. El SKYACTIV-D 2.2 l. monta un turbocompresor secuencial doble y un sistema common-rail con piezoinyectores multiorificio. Proporciona una combinación sin precedentes de resistencia y prestaciones dinámicas, a la vez que reduce sensiblemente las emisiones de óxido de nitrógeno (NOx) y partículas. A diferencia de otras unidades diésel, el par máximo de 380 Nm a 1800 rpm y los 110 kW / 150 CV a 4500 rpm ofrecen una potencia muy satisfactoria en todo el rango de revoluciones, desde parado hasta la zona roja de 5.500 rpm.
Con el motor 2.2 l. SKYACTIV-D bajo el capó, el nuevo Mazda3 pasa de 0 a 100 en 8 segundos con cambio manual y en 9,7 segundos con cambio automático (solo 5 puertas). La velocidad máxima es de 213 km/h y 201 km/h respectivamente. En cuanto al consumo de combustible y las emisiones de CO2 son de 3,9 l/100 km y 104 g/km (SportSedan con cambio manual) y 4,8 l/100 km y 127 g/km (5 puertas con cambio automático). Además, es muy limpio: cumple la normativa Euro 6 mucho antes de que entre en vigor (septiembre de 2014) y sin necesidad de costosos sistemas de postratamiento de NOx.
El cambio del futuro
Las transmisiones de seis velocidades SKYACTIV del nuevo Mazda3, especialmente desarrolladas para los motores SKYACTIV, responden con fidelidad a las instrucciones del conductor, proporcionan potencia lineal a las ruedas delanteras y contribuyen a una notable mejora en el consumo de combustible. El cambio automático SKYACTIV-Drive, disponible para la mayoría de las combinaciones de carrocería y motor del Mazda3, cambia con suavidad y precisión, al tiempo que proporciona al conductor un control excepcional sobre el comportamiento de reducción. Por su parte, el cambio manual SKYACTIV-MT, más deportivo, recuerda a los movimientos cortos y directos del selector del legendario Mazda MX-5. Ambas transmisiones son más ligeras y compactas que las del Mazda3 actual (ver cuadro).
Las prestaciones son tan solo un aspecto del carácter deportivo del coche. La conducción del nuevo Mazda3 está en todo a la altura de sus potentes cadenas cinemáticas, en especial en la forma en que el coche responde con exactitud a los deseos del conductor. Todo forma parte del conjunto.
SKYACTIV-G 2.0 l.: ¡Sin turbocompresor!
En su nueva generación de motores de inyección directa, Mazda ha vuelto a romper con lo establecido al proponer una gama de motores atmosféricos ligeros de cuatro cilindros. Todos los motores SKYACTIV-G disponibles en Europa para el nuevo Mazda3 tienen una relación de compresión ultra alta de 14:1, que entregan una interesantísima combinación de potencia, par y reducido consumo.
Tecnología esencial:
Un eficiente sistema de escape 4-2-1, reducir la cantidad de gases residuales en el interior del cilindro y rebajar la temperatura para:
- evitar la detonación,
- mejorar el efecto de purgado y lograr una combustión más eficiente,
- generar un extra de par, especialmente a bajas revoluciones.
Inyectores multipuerto con seis orificios: generan una mezcla perfecta de aire y combustible con un flujo potente, a la vez que facilitan el enfriamiento de los cilindros para eliminar la detonación.
El colector de admisión genera un poderoso torbellinado en la cámara de combustión para conseguir un encendido homogéneo, con mejor distribución de la llama, que redunda en una mayor entrega de par.
Las cavidades especiales en la cabeza de los pistones de aluminio ligero reducen las pérdidas por enfriamiento.
La doble distribución variable de válvulas (Dual S-VT) optimiza la sincronización de las válvulas de admisión de aire y de escape en función de las condiciones de funcionamiento del motor; con ello se minimizan las pérdidas de bombeo y:
- se maximiza el consumo de combustible cuando el motor trabaja a baja carga, porque se recircula una mayor cantidad de gases de escape calientes;
- se elimina la detonación cuando el motor trabaja a cargas elevadas, porque se deja entrar más aire y se favorece el desarrollo de par.
La estructura del sistema de lubricación de aceite se ha revisado para reducir la resistencia por fricción y con ella la pérdida de presión de aceite. Eso ha permitido incorporar una bomba de aceite más pequeña que se ajusta mejor a la velocidad y a la carga del motor.
Se ha reducido el peso usando un cigüeñal, pistones y bielas más ligeros; también se ha rebajado la fricción mecánica mediante la optimización del sistema de la cadena de distribución y la eficacia de la bomba de agua y camisas de cilindro:
- el motor es un 10% más ligero que los anteriores del Mazda3;
- un 15% más de par en la banda de velocidades medias y bajas;
- hasta un 20% de reducción en el consumo de combustible y de emisiones de CO2.
(Sistema de corte de ralentí i-stop de ser).
SKYACTIV-G 2.0 l.: "Dimensionado" para el mundo real
Muchos fabricantes están siguiendo una estrategia de reducción del tamaño de sus motores, especialmente los de gasolina. Por un lado reducen la cilindrada y, en ocasiones, el número de cilindros y, por otro, introducen tecnologías, tales como turbocompresores, para compensar la pérdida de potencia. En teoría, un motor más ligero se traduce en un coche más eficiente.
Como siempre, Mazda ha roto con lo establecido y ha renunciado a ese planteamiento en su gama de motores de gasolina de cuatro cilindros SKYACTIV-G. En su lugar, ha optado por relaciones de compresión ultra altas, aspiración natural y diseño ligero, para conseguir el mejor equilibrio posible entre entrega potencia y consumo eficiente de combustible.
Un buen ejemplo de ello es el motor SKYACTIV-G de 2,0 litros y 120 CV que monta el nuevo Mazda3. Este bloque de 2 litros se ha diseñado para competir con motores turboalimentados de tamaño reducido y potencia similar, y ofrece unas prestaciones comparables y un consumo de combustible parecido en el nuevo ciclo de conducción europeo. Pero en lo que realmente destaca es en la eficiencia de combustible en condiciones de conducción reales; por ejemplo, en autopista. En estas situaciones el SKYACTIV-G consume menos combustible que sus homólogos de baja cilindrada y turboalimentados en toda la banda de potencia, excepto a las revoluciones más bajas. También ofrece una aceleración más lineal, con una curva de rendimiento más suave y un extra de fuerza, sobre todo a altas revoluciones. En conjunto, es una solución verdaderamente orientada al cliente, fiel al espíritu Jinba Ittai, o de fusión entre el conductor y su vehículo.
Esta estrategia de Mazda de adaptar el motor "al mundo real" tiene tres ventajas principales:
- Aceleración y respuesta más lineales y naturales en todo el rango de velocidades, con un comportamiento Jinba Ittai más suave y con mayor entrega de potencia.
- Emisiones de CO2 y bajo consumo en condiciones reales mucho mejores que los motores de menor cilindrada con potencias comparables de la competencia, especialmente a revoluciones medias y altas.
- Todos los beneficios de una relación de compresión ultra alta, como superior eficiencia térmica y más par, para unos consumos muy ajustados en relación con la potencia desarrollada.
(Mediciones internas de Mazda).
SKYACTIV-D: Limpio, suave, silencioso y divertido
El motor SKYACTIV-D de Mazda también rompe con lo establecido. Utiliza una compresión extremadamente baja para reforzar las ventajas de los motores de encendido por compresión y reducir sus inconvenientes. Produce una potencia diésel que se sale de lo normal.
Tecnología esencial:
Una relación de compresión 14:1, la más baja del mundo, que mejora de forma significativa la eficacia del motor y la economía de combustible, gracias a:
- Una sincronización optimizada de la combustión, que produce una mejor relación de expansión.
- La forma convexa especial de la cabeza del pistón reparte con rapidez el combustible por la cámara de combustión, hasta alcanzar una distribución ideal.
- Piezoinyectores multiorificio que hacen posible:
-- 9 inyecciones por ciclo con presiones de hasta 2.000 bar
-- patrones de inyección adaptados a las condiciones del motor
-- arranques estables y eficientes, incluso en frío
- Alzada variable de las válvulas de escape, que estabiliza la combustión permitiendo que los gases de escape vuelvan a entrar en la cámara de combustión; de este modo se evitan fallos de encendido con el motor muy frío.
Un motor con una compresión más baja genera menos tensiones y fricción mecánica, lo que hace posible el uso de materiales y componentes más ligeros, como:
- un bloque motor de aluminio
- culata y paredes del cilindro de menor espesor
- un cigüeñal de menor diámetro
- un colector de escape integrado en la culata
El turbocompresor doble consiste en dos turbinas que funcionan de forma selectiva, según las condiciones de conducción: el más pequeño a bajas y medias revoluciones y el más grande a altas revoluciones. A revoluciones medias se alterna entre los dos para conseguir una turboalimentación más eficiente.
- El intercooler es más grande para conseguir más par y más respuesta a bajas revoluciones, además de una entrega de potencia muy correcta para un diésel.
- Junto con la baja relación de compresión, contribuye a unas prestaciones extraordinarias, sin ningún retardo del turbo.
- Contribuye a una cifra de consumo sobresaliente, de 3,9 l/100 km (con emisiones de 104 g/km de CO2).
Es mucho más limpio que los diésel convencionales actuales, con emisiones de NOX y partículas sensiblemente más bajas:
- cumple la normativa Euro 6 (que entrará en vigor en septiembre de 2014)
- no requiere costosos sistemas de postratamiento de los gases de escape
- Sistema de corte de ralentí i-stop de serie.
Transmisiones SKYACTIV
La transmisión automática de seis velocidades SKYACTIV-Drive ahorra combustible y aprovecha las ventajas de los distintos tipos de transmisión:
- Dinámica, suave y refinada, con el tacto directo y la aceleración de una transmisión manual.
- Respuesta del cambio mejorada, reducción de marchas más rápida y arranque más sencillo que con las transmisiones de doble embrague.
- Un cambio más suave y cómodo que el de las transmisiones de doble embrague o las automáticas de convertidor de par convencional.
- Menor consumo a altas velocidades que una transmisión de variador continuo (CVT); a bajas velocidades, un convertidor de par produce una sensación más directa que las CVT; de hecho el tacto es más directo a cualquier velocidad.
Entre las características exclusivas del nuevo Mazda3 destacan las siguientes:
- Transmisión directa en todo el intervalo, con un amplio rango de bloqueo del embrague del convertidor.
- Las centralitas del motor y la transmisión están conectados entre sí y ejercen un control conjunto sobre el par del motor y el funcionamiento hidráulico. El resultado se plasma en unos cambios rápidos y fluidos, con irregularidades mínimas.
- Una palanca de cambios diseñada para ajustarse perfectamente a la palma de la mano, que se acciona casi sin esfuerzo, tanto en modo automático como en secuencial.
- El nuevo interruptor de cambio forzado en el pedal del acelerador evita reducciones no deseadas, utilizando un dispositivo que aumenta la resistencia en una cierta posición del recorrido del acelerador, avisando así al conductor de que es inminente una reducción de la marcha, para que este decida entre…
-- disminuir la presión en el pedal para evitar la reducción
-- incrementar la presión para reducir
(Levas de cambio disponibles en función del equipamiento y del mercado).
SKYACTIV-MT: más ligera, más suave, más rápida
El cambio de marchas deportivo del Mazda MX-5 se encuentra también disponible en el nuevo Mazda3, en forma de una caja SKYACTIV-MT manual de seis velocidades con características como las siguientes:
- Cambios precisos y suaves con un ligero golpe de muñeca, gracias entre otras cosas a una estructura optimizada del varillaje y a una palanca de cambios 70 mm más corta, con un ángulo de inclinación mayor.
- Una nueva arquitectura más compacta, para una sincronización y una transferencia de par más precisas, y cambios con un recorrido un 10% más corto.
- Diseño ligero, para ahorrar espacio, con menos componentes y menos fricción interna…
-- menor consumo de combustible que el actual Mazda3 con cambio manual de seis velocidades
-- organización más eficiente del vehículo
-- una unidad entre un 7 y un 16% más ligera, según la versión.
- Tanto la transmisión SKYACTIV-Drive como la SKYACTIV-MT se encuentran disponibles en versión estándar (> 270 Nm) y grande (>460 Nm) y son compatibles incluso para los motores diésel SKYACTIV-D de alta generación de par.
i-ELOOP: aprovechamiento de la energía de frenada en versión Mazda
El freno regenerativo i-ELOOP, único en su clase, es un elemento importante del Zoom-Zoom sostenible, el compromiso de Mazda de reducir al mínimo el impacto medioambiental de sus vehículos. i-ELOOP es la abreviatura en inglés de Intelligent Energy Loop (o regeneración de energía inteligente) y es el primer sistema del mundo para turismos que emplea un condensador acumulador para almacenar la energía recuperada en deceleración, en forma de electricidad.
Mazda utiliza un condensador de doble capa eléctrica (EDLC) en lugar de una batería específica. Este condensador EDLC tiene una gran capacidad para cargar y almacenar energía con gran rapidez durante los ciclos de frenado, que en general duran en torno a diez segundos. En contraste, las baterías tipo acumulador de plomo que se utilizan habitualmente en los automóviles tienen un potencial mucho más limitado de carga rápida y almacenamiento. Otra ventaja del EDLC es su larga duración: se puede recargar una y otra vez con un deterioro mínimo, a diferencia de las baterías de ion litio que se utilizan, por ejemplo, en los vehículos eléctricos.
Este sistema utiliza un alternador de tensión variable de 12 V-25 V para generar eficazmente electricidad desde el mismo momento en que se suelta el acelerador. El EDLC se carga por completo en tan solo 7 segundos, es decir, en un solo ciclo de deceleración. Después de cargar, un convertidor DC/DC reduce la tensión de la electricidad almacenada en el EDLC hasta 12 V y la emplea para alimentar componentes eléctricos del vehículo, como el climatizador y los sistemas de audio. Cualquier excedente de electricidad se envía a la batería.
La carga completa del condensador puede hacer funcionar los sistemas eléctricos del vehículo durante el tiempo suficiente como para no tener que recurrir a la electricidad de la batería, ni siquiera cuando el sistema de corte de ralentí de Mazda para el motor en un semáforo. De hecho, durante la circulación con paradas típica de la ciudad, a menudo el condensador empieza a recargarse de nuevo antes de descargarse por completo. Por tanto, el i-ELOOP es capaz de cubrir la mayoría de las necesidades de electricidad del coche, si no todas. Esto libera parte de la potencia del motor. Solo hay que pensar que el 10% de la potencia se consume en hacer funcionar el alternador. En combinación con el i-stop, el i-ELOOP reduce el consumo en condiciones reales de conducción en el tráfico urbano cotidiano.
i-stop: innovación de serie para ahorrar combustible
El sistema de corte de ralentí i-stop de Mazda ahorra combustible y es el único que emplea energía de combustión para volver a arrancar el motor. Para ello, dispone de un sofisticado módulo de control que detiene el motor en el momento perfecto del ciclo: la carrera de encendido-expansión para los motores de gasolina o en la carrera de compresión para los diésel. De hecho, el i-stop apaga el motor en el momento perfecto. Todo ello en una fracción de segundo, por lo que el conductor ni siquiera lo nota.
En consecuencia, el sistema i-stop proporciona los arranques más rápidos del mercado: 0,35 segundos en los motores de gasolina SKYACTIV-G y solo 0,4 segundos en los diésel SKYACTIV-D: en la primera carrera de compresión, en vez de en la segunda, a diferencia de los sistemas convencionales. El motor vuelve a arrancar en cuanto el conductor presiona el embrague (con transmisión manual) o suelta el freno (con transmisión automática), a condición de que los cinturones de seguridad estén abrochados y las puertas cerradas.
Chasis y carrocería: Movidos por el entusiasmo
Aunque siempre ha sido un placer conducirlo, en el nuevo Mazda3 la agilidad y la respuesta lineal han evolucionado hasta alcanzar un grado de sofisticación nunca visto. El vínculo con el Mazda3 se refuerza en cada desplazamiento. Incluso ayuda a conducir mejor. Y, desde luego, invita a seguir practicando.
Tanto la carrocería ligera SKYACTIV-Body como el SKYACTIV-Chassis, empleados en el Mazda CX-5 y en el nuevo Mazda6 (dos modelos que destacan en sus respectivos segmentos por el placer de la conducción que ofrecen), combinan altas prestaciones con características excepcionales de aerodinámica, seguridad y rumorosidad. Estas cualidades son incluso más evidentes en el Mazda3, hecho a la medida de la tecnología SKYACTIV pero con las proporciones del segmento C.
Mazda ha hecho ajustes en el SKYACTIV-Chassis del nuevo Mazda3 para responder con mayor fidelidad a los deseos del conductor. Solo hay que fijarse en los giros. El conductor experimenta algo parecido al control absoluto: los neumáticos se agarran firmemente a la carretera mientras la dirección hace que el vehículo trace la curva con precisión. No hay el más mínimo indicio de esos subvirajes frecuentes en los coches con tracción delantera; solo un suave y predecible balanceo cuando la carga bascula de un lado al otro. La armoniosa respuesta lineal a las fuerzas G laterales y longitudinales reduce al mínimo la necesidad de corregir la dirección con el volante. Y tampoco se producen reacciones excesivas del coche cuando se frena dentro de una curva, se corrige la dirección o se acelera a la salida. El conductor sabe exactamente qué hacer y esa es una sensación muy satisfactoria.
Transiciones suaves
La dirección y suspensión, perfectamente equilibradas, aportan una experiencia sorprendentemente cómoda, ágil y de confianza. Se ha utilizado acero de alta resistencia (780 MPa) en los brazos inferiores de la suspensión delantera tipo MacPherson y en los brazos de la suspensión multibrazo trasera. Esto no solo hace que la suspensión pese menos, sino que también suaviza las transferencias de carga cuando se mueve por las fuerzas G en los virajes. Y como la suspensión delantera se ha montado en un nuevo subchasis perimetral con un ángulo de avance mayor, se ha mejorado el par de autocentrado y la estabilidad a altas velocidades.
Por su parte la ubicación de la suspensión multibrazo trasera y la mayor rigidez de los bujes mejoran la sujeción lateral de los neumáticos traseros. Al mover la posición del brazo hacia adelante, los amortiguadores absorben mejor las irregularidades de la carretera. Los propios amortiguadores se han optimizado para conseguir un equilibrio perfecto entre conducción ágil a velocidades de bajas a medias y estabilidad cuando se circula más rápido, por no hablar del confort de marcha y los frenos. Algunas de las medidas utilizadas en el Mazda6 para mejorar la rigidez, travesaños más grandes y gruesos, se han aplicado también al bastidor del Mazda3, hasta obtener un chasis que es referencia dentro de su segmento en cuanto a rigidez.
La baja desmultiplicación de la dirección asistida eléctrica (14:1 en vez de los 16,2:1 del modelo actual) reduce los movimientos del volante, lo que mejora la agilidad y ayuda a evitar la fatiga del conductor, especialmente en ciudad y en carreteras muy viradas. Además, es un sistema más pequeño, más ligero y con una mayor eficiencia energética. Los frenos llevan pistones más pequeños, servofrenos revisados y una holgura de pedal menor para evitar la resistencia al movimiento. Todo ello mejora el control de frenada, la respuesta y el consumo de combustible. Los nuevos frenos son especialmente efectivos sobre firmes mojados, y más aún si se combinan con nuevos neumáticos de alta adherencia. Las distancias de frenado son considerablemente más cortas que en el modelo actual y se sitúan entre las mejores del segmento.
Refinado y responsable
Al igual que el chasis, la carrocería SKYACTIV-Body del nuevo Mazda3 tiene una estructura a la vez más ligera y más rígida. Esas características mejoran el consumo de combustible y la seguridad, además del confort de marcha y el placer de conducción general... En otras palabras, la satisfacción económica y emocional del propietario. Como en los demás modelos SKYACTIV, la carrocería sigue un concepto de bastidores continuos, secciones rectas y uniones reforzadas para, en caso de colisión, dispersar la energía por toda la estructura, alejándola del habitáculo. Asimismo se ha incrementado notablemente la proporción de acero de alta resistencia y de resistencia ultra alta en comparación con el anterior Mazda3.
Esto, por supuesto, hace que el nuevo Mazda3 sea más fuerte -la rigidez torsional es un 31% más alta en el 5 puertas y un 28% en el SportSedan- pero a la vez más ligero (ver cuadro). La aerodinámica también hace contribuciones positivas a la excelente estabilidad y a los consumos del Mazda3. Los ingenieros de Mazda han mejorado el flujo de aire bajo el vehículo mediante el empleo de nuevas carenas inferiores y deflectores en los neumáticos, entre otras medidas. También han añadido una parrilla de aire activa que suaviza el flujo de aire cerrando la calandra inferior delantera cuando el motor no necesita aire para refrigerarse. Otras características destacables que también influyen en el consumo de combustible son los tiempos de calentamiento del motor, que se han acortado, y el funcionamiento a temperaturas más próximas a las ideales. Al optimizar el flujo de aire en la parte superior de la carrocería, los spoilers traseros del techo del 5 puertas y del maletero del SportSedan producen un efecto solidario con el flujo inferior que suprime las turbulencias. Como resultado, los coeficientes del nuevo Mazda3 se sitúan entre los mejores de los vehículos producidos en serie (0,258 para el SportSedan y 0,275 para el 5 puertas).
Confort y tranquilidad a bordo
Los coches más ligeros suelen vibrar más y transmitir más ruido al habitáculo. Por eso, Mazda ha analizado cuidadosamente las fuentes del ruido, como el motor y los neumáticos, y ha bloqueado las rutas por los que se introduce en la cabina. El ruido se ha canalizado hacia materiales insonorizantes ubicados en puntos estratégicos, como el salpicadero, las alfombrillas, la parte de la cubierta trasera situada detrás de los asientos traseros y el guarnecido lateral del maletero. El aislamiento sonoro aporta muy poco peso y elimina con gran efectividad los desagradables ruidos de alta frecuencia. También se ha añadido un conjunto de ejes contrarrotantes al motor SKYACTIV-D 2.2, que minimiza las vibraciones que llegan al habitáculo a través de los soportes del motor. Otros elementos también ayudan a reducir el ruido en el habitáculo y la vibración de la carretera; por ejemplo, una cadena cinemática más rígida, amortiguadores más blandos y mejoras en el sistema de admisión y escape del motor. Como resultado, el interior del nuevo Mazda3 es uno de los más silenciosos de su clase.
Cuanto más se conoce el nuevo Mazda3, mejor se aprecia el placer de conducción sofisticado y refinado que ofrece. Un comportamiento superior también redunda en un coche más seguro. En combinación con las estructuras avanzadas de la carrocería, las posibilidades de sufrir lesiones son menores. Y para eso, la primera medida es anticiparse a los problemas. Volverá a casa sano y salvo una y otra vez. Todo es parte del mismo concepto.
Menos es más: la Estrategia del gramo aplicada al nuevo Mazda3
A Mazda le obsesiona el peso, y con razón. A fin de cuentas, un coche más ligero puede ofrecer más diversión y puede ser más respetuoso con el medio ambiente, puesto que necesita menos para dar más prestaciones. Eso justifica la Estrategia del gramo de Mazda, que busca de forma continua posibilidades de rebajar el peso sin afectar ni a la solidez ni a la seguridad.
El nuevo Mazda3 no es ninguna excepción en este sentido. Aunque los cambios que mejoran las prestaciones suelen añadir peso (por ejemplo, si las ruedas son más grandes, los frenos tienen que serlo también), el modelo de 5 puertas es mucho más ligero que el actual. De hecho, con un peso en orden de marcha a partir de 1.196 kg (SportSedan) y 1.200 kg (5 puertas), el Mazda3 es uno de los vehículos más ligeros del segmento C europeo.
Estas son algunas de las medidas que lo han hecho posible:
- Adopción de cadenas cinemáticas ligeras SKYACTIV (ver capítulo 6).
- Revisión a fondo de más de 300 componentes de la carrocería e incremento de la proporción de aceros de alta resistencia en la carrocería hasta el 60% en el nuevo modelo:
-- el acero de alta resistencia de 780 MPa constituye ahora el 9% del total (anteriormente el 4%),
-- por primera vez se ha utilizado acero de resistencia ultra alta en el Mazda3 (para reforzar los estribos laterales)
-- acero de resistencia ultra alta de 1.800 MPa para reforzar los parachoques delantero y trasero (ahora pesan 4 kg menos)
-- menos piezas en el bastidor delantero (ahora es un 38% más ligero)
-- las formas de los componentes se han optimizado para aumentar su resistencia pero no el peso (por ejemplo la carrocería ahora es más rígida pero pesa 1 kg menos)
- Entre las mejoras en el sistema de suspensión destacan las siguientes:
-- acero de 780 MPa en los brazos inferiores de la suspensión delantera y en los brazos de la suspensión trasera (novedad en Mazda)
-- se han eliminado los rebordes soldados y se ha adoptado un nuevo proceso de soldadura, que produce uniones más ligeras y rígidas
-- se ha mantenido el peso de la suspensión delantera, a pesar del nuevo subchasis perimetral
-- suspensión trasera mejorada sin incremento de peso
- En el nuevo sistema de dirección asistida eléctrica se ha eliminado la bomba hidráulica y las correspondientes tuberías; el bloque de la ECU es ligero y lleva integrado el motor de la dirección:
-- 2 kg menos que el sistema de dirección electrohidráulica del modelo actual
- En los asientos delanteros se han aplicado refuerzos de acero de alta resistencia a la estructura interna, con lo que se han eliminado los reposacabezas activos; por su parte, la banqueta trasera presenta una forma modificada y un asiento más corto:
-- ahorro de 7 kg de peso
- Se han reducido los mazos y las longitudes de cable, reduciendo en 3 kg el peso del sistema eléctrico.
- Se ha mejorado la estructura de los neumáticos y los frenos, y se han adoptado guardabarros más finos, para ahorrar otros 4,4 kg de peso.
Seguridad
Todo en el nuevo Mazda3 invita a conocerlo, a iniciar una relación, a entrar en contacto y a inspirar nuevos descubrimientos. Es un compañero fiel que también se ha diseñado para proteger a quienes viajan en su interior y a los que se encuentran a su alrededor... de más formas de las que parece a primera vista.
Desde luego, es obvio que la extraordinaria interacción entre la suspensión, la dirección, los frenos y las cadenas cinemáticas del nuevo Mazda3 aumentan el control y, por ende, la seguridad. También es importante la contribución del diseño interior y la comodidad, porque reduce el estrés, la fatiga y la distracción del conductor. En pocas palabras, Mazda ha creado un coche seguro, con un diseño ligero que simplifica la conducción, pero con unas estructuras rígidas de chasis y carrocería que absorben eficazmente la energía de colisión en caso de accidente.
Protección ampliada
Mazda tiene un enfoque de seguridad proactiva diseñado para evitar accidentes. La base consiste en ayudar al conductor a cada paso del camino, ayudándole a reconocer los peligros potenciales, pero también minimizando el riesgo de sufrir una colisión y los daños en el caso de que éstos se produjeran. Por supuesto, en todo este proceso, la protección a los ocupantes y a los peatones debe ser máxima. El concepto se puede desglosar en tres categorías complementarias entre sí: seguridad activa (evitar los riesgos), seguridad precolisión (evitar accidentes o reducir los daños) y seguridad pasiva (limitar el daño a los ocupantes y peatones).
En conjunto, Mazda denomina i-ACTIVSENSE a sus tecnologías de seguridad avanzada, basadas en sensores y en radar. La primera línea de defensa -la seguridad activa- se encarga de detectar riesgos potenciales e informar al conductor, para que este reaccione de la forma más oportuna.
Estos sistemas ayudan al conductor a mantener bajo control los alrededores del vehículo. Por ejemplo el Asistente de cambio de carril (RVM), que emplea tecnología de radar, informa al conductor cuando se aproxima un vehículo desde atrás por un carril contiguo (incluso por los ángulos muertos), encendiendo un led en el retrovisor lateral correspondiente. Si el conductor activa entonces el intermitente para cambiar de carril, el led parpadea y emite un aviso sonoro. El RVM, que ganó un premio Euro NCAP Advanced en 2011 cuando fue incorporado al actual Mazda3, funciona ahora a partir de 30 km/h, en lugar de los 60 km/h anteriores. Por su parte, el Sistema de alerta de cambio involuntario de carril (LDWS) vigila las líneas de separación de carriles a partir de 65 km/h y alerta al conductor mediante un sonido característico (similar al de las bandas sonoras de los arcenes) y testigos visuales si detecta cambios de carril involuntarios. El Sistema de asistencia para el reconocimiento de distancias (DRSS) calcula y muestra la distancia a la que se encuentra el vehículo precedente y el tiempo hasta un alcance. Funciona a velocidades de entre 30 y 200 km/h.
Compartir la carretera
En Mazda, ayudar a los demás vehículos también es parte de la seguridad activa. Esa es la idea, por ejemplo, de la Señal de parada de emergencia (ESS), que enciende las cuatro luces de emergencia para avisar a los otros conductores en caso de que nuevo Mazda3 frene bruscamente a velocidades superiores a 50 km/h. Y también el Sistema de control de luces de largo alcance (HBC), que emplea una cámara para detectar otros vehículos y cambia automáticamente las luces largas por las cortas para no deslumbrar a los demás conductores. También activa las luces cortas si la carretera está bien iluminada y el vehículo circula a menos de 30 km/h. Y en lo que respecta a la visibilidad, el nuevo compacto de Mazda ilumina mejor las curvas. El Sistema de iluminación frontal adaptativa (AFS) predice la forma de la curva basándose en la velocidad y la posición del volante, y gira los faros en la dirección oportuna para iluminarla. El Asistente de arranque en pendiente (HLA) es otro sistema de gran utilidad, ya que mantiene la presión del freno para evitar que el vehículo caiga hacia atrás al arrancar en cuesta.
¿Pero qué ocurre si a pesar de estas medidas la colisión es inminente? Entonces entra en acción la tecnología de seguridad pre-impacto i-ACTIVSENSE. Al igual que los sistemas anteriores, también advierte al conductor del peligro. La diferencia es que, además, realiza acciones evasivas si es preciso para evitar un accidente o limitar los daños; este es el caso del Control de crucero adaptativo (MRCC) y la Frenada de emergencia (SBS) (ver cuadro). Naturalmente, el nuevo Mazda3 también dispone de ABS de serie con distribución electrónica de la fuerza de frenado (EBD) y asistencia a la frenada (EBA), control de estabilidad (DSC) y control de tracción (TCS).
Desde todos los puntos de vista…
Pero a veces los accidentes son inevitables. Ahí es donde entra en acción el coche en sí, desde el punto de vista estructural. En este segmento, como en todos los demás, el nuevo Mazda3 es más seguro que nunca y dispone de un formidable equipamiento de seguridad pasiva. Ante todo, una carrocería SKYACTIV, ligera pero de alta rigidez, capaz de absorber impactos procedentes de cualquier dirección (frontales, laterales o traseros) y de canalizarlos fuera del habitáculo.
En caso de colisión delantera, las fuerzas de impacto son absorbidas por las zonas de deformación en forma de X y canalizadas a través de varias rutas de dispersión de carga integradas en la carrocería SKYACTIV. Las mejoras incluyen una estructura revisada de los estribos laterales, para evitar que la rueda pueda invadir el habitáculo a consecuencia de pequeños impactos frontales. Las colisiones frontales leves (hasta 15 km/h) son absorbidas por elementos atornillados fáciles de sustituir, lo cual evita daños en el bastidor delantero y en los componentes del motor.
En caso de impacto lateral, una sólida estructura ininterrumpida, que une el techo y los pilares B a la parte inferior de la carrocería, minimiza la deformación del habitáculo y por tanto el potencial de lesiones, de nuevo controlando la dispersión de la energía de colisión. Entre otras novedades cabe citar los refuerzos en las uniones, barras de impacto adicionales y refuerzo de los largueros del techo hasta duplicar el tamaño de los del modelo actual.
En cuanto a las colisiones traseras, el nuevo Mazda3 dispone, por ejemplo, de un bastidor trasero y de un parachoques reforzados, construido de acero de resistencia ultra alta de 1.800 MPa. Estas y otras medidas aumentan la absorción de energía, protegen el habitáculo y evitan que se rompa el depósito de combustible.
…y en el interior
Absorber la energía de impacto es todo un desafío para el habitáculo. Mazda ha rediseñado muchos componentes interiores y varias secciones del guarnecido para atenuar cualquier golpe que puedan sufrir los ocupantes en caso de accidente. Desde los reposabrazos huecos al empleo de nuevos materiales amortiguadores en los pilares A y B.
El nuevo Mazda3 incluye de serie airbags frontales, laterales y de cortina, además de cinturones de seguridad con pretensores en las plazas delanteras, para una mejor sujeción durante una colisión. Los cinturones de seguridad delanteros también cuentan con limitadores de carga para evitar una presión excesiva sobre el tórax. Se ha rediseñado la estructura del asiento, del respaldo y de los reposacabezas para reducir el riesgo de lesiones. El equipamiento de serie incluye anclajes para asientos infantiles ISOFIX en las plazas traseras. Los respaldos, los elementos de montaje, las bisagras, los seguros y el mecanismo para reclinar los asientos traseros se han reforzado para impedir que el equipaje invada el habitáculo. Por último, el diseño del capó y del parachoques delantero minimiza las lesiones en la cabeza y las piernas que puede sufrir un peatón en caso de atropello.
Tras someter al nuevo Mazda3 a diversas pruebas de impactos, en Mazda estamos seguros de que cumple la normativa más estricta del mundo y de que conseguirá la máxima puntuación de cinco estrellas Euro NCAP, así como otras calificaciones equivalentes en todo el mundo.
Cuando el riesgo es crítico…
- Aviso de obstrucción delantera (FOW)
Un sistema basado en sensores de radar de microondas, denominado FOW, efectúa un seguimiento del vehículo precedente, cuando se viaja a velocidades entre 15 y 200 km/h. Si el nuevo Mazda3 se aproxima demasiado, emite una señal de alarma sonora y un aviso visual ("FRENO") en lugar del indicador DRSS (ver más arriba).
- Frenada de emergencia (SBS)
La Frenada de emergencia o SBS trabaja en colaboración con el FOW para monitorizar vehículos que se encuentran hasta 140 m por delante. Si el FOW emite una alarma, el SBS precarga los frenos y los aplica con una fuerza proporcional al nivel de peligro. La precarga se cancela si el conductor reacciona evitando el riesgo. Al igual que el FOW, el SBS funciona a velocidades de entre 15 y 200 km/h, y ayuda a evitar o, al menos, a reducir la gravedad de un alcance con el vehículo precedente, incluso a velocidades elevadas.
- Sistema de asistencia a la frenada en ciudad (SCBS)
Diseñado fundamentalmente para la conducción urbana, el SBCS es el sistema de frenado de emergencia a baja velocidad de Mazda. Utiliza un sensor de infrarrojo cercano para monitorizar los vehículos situados por delante, a velocidades entre 4 y 30 km/h, con un alcance de hasta 6 metros. Como el SBS, el SCBS precarga los frenos si detecta un alto riesgo de alcance, y los acciona si lo considera necesario. Ambos sistemas se complementan entre sí a la perfección, cubriendo velocidades desde 4 a 200 km/h. En condiciones normales y con el firme seco, evitan por completo las colisiones por debajo de 30 km/h.
Según Euro NCAP, los vehículos con sistemas automáticos de frenada de emergencia tienen hasta un 27% menos de accidentes y reducen considerablemente las lesiones. Por este motivo, Euro NCAP va a incluir la evaluación de estos sistemas en sus clasificaciones de seguridad de vehículos a partir de 2014. Así que, a diferencia del 79% de los modelos que se comercializan en Europa, el nuevo Mazda3 -al igual que el Mazda6 y el Mazda CX-5- ya está equipado para el futuro.
- Control de crucero adaptativo (MRCC)
Otro sistema relacionado es el MRCC, que también emplea un radar de microondas para observar al vehículo precedente. Este sistema ajusta automáticamente la presión del freno y del acelerador para mantener una distancia de seguridad correcta, programada de antemano por el conductor. Este sistema, que se introdujo por primera vez en el Mazda6, se encuentra ahora disponible en el Mazda3.
El MRCC funciona a velocidades de entre 30 y 200 km/h y ayuda a adaptarse con flexibilidad a condiciones cambiantes de tráfico. Por ejemplo, si una autopista tiene tráfico lento, el MRCC se reajusta automáticamente a distancias de seguridad mucho más cortas. Y sigue funcionando si, por ejemplo, frenamos en una salida en curva de la autopista y después aceleramos, siguiendo a otro vehículo, hasta incorporarnos a otra carretera. Solo deja de funcionar si la velocidad del coche baja de 20 km/h.
El sensor de radar detecta con precisión vehículos que circulan por delante a distancias de hasta 140 metros en todo tipo de condiciones: de noche, con lluvia torrencial o a pleno sol. Resulta muy descansado para el conductor, alivia la tensión y previene la fatiga, sobre todo en viajes largos.
Nota: Equipamientos, opciones y disponibilidad dependiendo de los mercados.
| Fuente: Mazda | Alcance: España
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