Nissan presenta en el Salón de Shanghai su modelo conceptual y futurista Friend-ME, diseñado, según la marca nipona, para "los jóvenes chinos", con un interior inspirado en los jets privados y con espacio hasta para cuatro pasajeros, el sedan tiene unas formas muy musculosas y fluidas, y su nombre quiere evocar la cercanía y amistad con los jóvenes veinteañeros chinos.
Nissan no ha dado datos técnicos, centrándose únicamente en las virtudes estéticas del modelo, y parece ser que ese es su único objetivo: llamar la atención, entrar por los ojos y seducir. Ciertamente el modelo es llamativo, pero no hay que exagerar. Sus interior parece incluso estrafalario, con un abuso en demasía del LCD, y su exterior demasiado onduloso acaba dando la sensación de coche moldeado "en plastilina".
A este diseño tan curvilíneo Nissan lo define como un "boomerang", y especifica que es agresivo y deportivo a la vez. Claro que para gustos están los colores, y cada uno tiene los suyos propios.
| Redacción: Revista Coche
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