Varios defectos afectan al nuevo Jimny. Unos propiciados por el propio fabricante, y, otros, por la normativa europea. Entre los primeros podemos destacar una cierta complacencia por parte de Suzuki, que aleja al Jimny de enriquecerlo con la falta de alternativas que podrían hacerlo mucho más atractivo para el consumidor, como motores diesel, transmisiones automáticas y equipamiento más rico y variado. Y entre los defectos obligados por normativa, se encuentra, cómo no, la normativa anticontaminación. Así, en este nuevo Jimny 2013 se podría muy bien aplicar de aquéllo: "entre todos lo han matado, y él solo se murió". Porque lo único que quedará del Jimny europeo (¡cuántos echarán de menos ahora el Samuray!) será un único motor de gasolina, de 1.3 litros, con 85 CV, y con unas emisiones de nada menos que 162 gr/km de CO2. Un propulsor que, además, en tráfico urbano es lento y muy difícil de llevar (y todos los que lo han probado sabrán por qué lo digo, ya que en cuestas es una auténtica tortura su falta de par).
Así, no es extraño que lo único que le haya hecho Suzuki a este pequeño todo-terreno para Europa sea cambiarle el color de los faros (oscurecerlos), rediseño de paragolpes y retoques de interior. Y poca cosa más. Es una lástima. El modelo podría ofrecer mucho más de lo que ofrece, pero esta reminiscencia de los "key-car" japoneses (que en el país del lejano oriente se venden como rosquillas) aquí, por una u otra causa, nunca han calado. Ejemplo de esto lo tenemos en el Nissan Cube, que en su día fue retirado del mercado prácticamente nada más llegar.
A veces -como parece ser el caso- por desidia del fabricante (en Japón estos pequeños modelos son otra cosa que aquí ni soñamos tener), y en otros casos, por falta de clientela en Europa. Porque variantes como el Jimny tienen competidores como el Nissan Kix, o el mismo Mitsubishi Pajero Mini. En el "viejo continente" se sustituyen por las estrellas (mejor equipados, pero mucho más caros) de modelos como el Nissan Juke, Mitsubishi ASX o Mini Countryman. Afortunadamente, también van apareciendo variantes mucho mejores, como el mismo Ford Ecosport
| Redacción: Revista Coche
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