Deportivo, atractivo y versátil: el SUV de altas prestaciones Audi Q5 es el SUV del segmento medio con más éxito de Europa. Con nuevas soluciones en el diseño, en el infotainment, en los sistemas de asistencia y en los motores, este modelo es ahora incluso mejor. El Q5 hybrid quattro aúna la fuerza de un seis cilindros con el consumo de un cuatro cilindros, mientras que el nuevo SQ5 TDI aporta a la serie el toque dinámico con sus 313 CV (230 KW) de potencia; es además el primer modelo S de Audi equipado con un motor diésel.
El deportivo diseño del Q5, con la cúpula del techo plana, se presenta concienzudamente revisado y mejorado. La parrilla Singleframe tiene en la parte superior las esquinas oblicuas, mientras que las barras cromadas verticales y los aros Audi se caracterizan por sus formas expresivas. El paragolpes, las entradas de aire y los faros antiniebla también son nuevos.
En los faros opcionales xenón plus, la luz diurna LED dibuja una horquilla circundante, similar a la de la luz trasera de los grupos ópticos traseros. Con carácter opcional, el deportivo paquete exterior S line y el llamativo paquete de diseño Offroad acentúan la imagen del Q5. El portón del maletero envolvente, un elemento típico de los modelos Q de Audi, y el capó del motor se han fabricado en aluminio. En el habitáculo, los aceros de alta tecnología endurecidos en molde reducen el peso; son extremadamente resistentes y ligeros a la vez.
Más potencia, menos consumo: los motores
La remodelación del Audi Q5 ha dado como resultado una reducción del consumo de hasta un 15%, a pesar de que la mayoría de los motores ha incrementado su potencia. Los tres TDI y los dos TFSI combinan la inyección directa con la sobrealimentación y equipan de serie el sistema de arranque y parada.
El 2.0 TDI está disponible en dos variantes. En la versión de 143 CV (105 KW) sólo consume, de media, 5,3 litros de diésel a los 100 km. El 3.0 TDI, profundamente perfeccionado, entrega 245 CV (180 KW) y 580 Nm de par, y catapulta al Q5 hasta los 100 km/h, con salida parada, en 6,5 segundos.
Otra estrella de la oferta de motores es el TFSI de dos litros, completamente nuevo. Este motor de gasolina incorpora revolucionarias soluciones, por ejemplo en la gestión de las válvulas y de su alzada, en la innovadora gestión térmica, en el turbocompresor, en la integración del colector de escape en la culata y en el sistema common rail, que integra una inyección adicional en el colector de admisión.
El 2.0 TFSI rinde 225 CV (165 KW), aunque en combinación con el tiptronic sólo consume de media 7,9 litros a los 100 km. Mayor potencia aún ofrece el nuevo 3.0 TFSI: el V6 sobrealimentado por compresor genera 272 CV (200 KW) de potencia y 400 Nm de par motor, y acelera de los 0 a los 100 km/h en 5,9 segundos.
Audi ofrece para cada motor la transmisión de fuerza adecuada. Las motorizaciones de cuatro cilindros equipan de serie un cambio manual de seis marchas. El deportivo S tronic de siete velocidades se monta de serie en el
3.0 TDI, y está disponible como opcional para el 2.0 TDI de 177 CV (130 KW). El 2.0 TFSI se puede equipar opcionalmente con el confortable tiptronic de ocho velocidades, que se monta de serie en el 3.0 TFSI.
En las variantes de cuatro cilindros, las cajas de cambios se integran en la gestión térmica de los motores, lo que acorta notablemente su fase de calentamiento. La tracción integral permanente quattro con gestión del par individual para cada rueda pertenece al equipamiento de serie, con excepción del 2.0 TDI de 143 CV (105 KW), equipado con tracción delantera.
Progreso en la eficiencia: la servodirección electromecánica
Otro avance en el ámbito de la eficiencia viene de la mano de la nueva servodirección electromecánica: cuando el Q5 circula en línea recta, no consume energía. En el tren de rodaje, Audi ha mejorado aún más el equilibrio de los amortiguadores y de los estabilizadores. Las ruedas de aluminio presentan en la mayoría de las motorizaciones una diagonal de 18 pulgadas, aunque el cliente también puede optar por diámetros de hasta 20 pulgadas y por el tren de rodaje deportivo S line.
El control electrónico de estabilización (ESC) detecta el estado del firme y adapta sus intervenciones; el asistente para el descenso de pendientes pertenece al equipamiento de serie.
El sistema de conducción dinámica Audi drive select hace aún más versátil el perfil del Q5. Este sistema permite al conductor gestionar en cuatro modos diferentes, entre ellos también el modo de funcionamiento efficiency, la línea característica del pedal acelerador, los puntos de cambio de marcha del cambio automático, la asistencia de la dirección y el funcionamiento del climatizador automático. Si el vehículo equipa un sistema de navegación Audi, el conductor dispondrá además de un quinto modo que en gran medida podrá programar libremente y que se denomina individual.
En la regulación del Audi drive select se puede integrar también una serie de componentes opcionales de alta tecnología. En concreto se trata del control de velocidad por radar adaptive cruise control, del tren de rodaje con regulación de la amortiguación y de la dirección dinámica. Ésta última varía su relación de transmisión en función de la velocidad y mejora la estabilidad al alcanzar el límite de estabilidad en curva.
Versátiles: los sistemas de asistencia al conductor
En el ámbito de los sistemas de asistencia al conductor, el Audi Q5 remodelado también marca la pauta en su clase. El nuevo sistema de información al conductor con recomendación de descanso se equipa de serie. Cuando detecta que la concentración del conductor disminuye, le insta a tomarse un descanso.
Entre los sistemas de asistencia disponibles con carácter opcional, el más innovador es el adaptive cruise control evolucionado. El control de velocidad por radar regula la distancia del Q5 respecto al vehículo precedente; por debajo de los 30 km/h de velocidad es capaz de iniciar una frenada a fondo si detecta un riesgo de colisión por alcance. El Audi active lane assist ayuda al conductor mediante discretas correcciones en la dirección a mantenerse en su carril; el Audi side assist vigila el espacio ubicado detrás del vehículo, con lo que el cambio de carril se puede llevar a cabo de un modo más relajado. Tres sistemas que permiten aparcar cómodamente completan la oferta.
En el ámbito del infotainment Audi pone a disposición de sus clientes una amplia oferta, liderada por el MMI navigation plus. Esta gran central mediática presenta mejoras en muchas de sus funciones, como por ejemplo en el control por voz. Su complemento ideal es el teléfono de automóvil Bluetooth online. Su punto de acceso inalámbrico WLAN integrado permite a los acompañantes navegar libremente por Internet y acceder a su correo electrónico con sus dispositivos móviles.
El teléfono de automóvil Bluetooth online también tiene algo que ofrecer al conductor, descargando en el vehículo los servicios de Audi connect. Entre ellos destacan, por ejemplo, la búsqueda Point of Interest con control por voz incluido o la navegación con imágenes de Google Earth y Street View. La Información de tráfico Audi online muestra en el mapa de navegación la densidad del tráfico en la ruta seleccionada. Con la aplicación para smartphones Audi Music stream se pueden recibir muchas emisoras de radio de Internet, y permite además memorizar las favoritas en el teléfono móvil. El programa seleccionado se escucha vía WLAN a través de los altavoces del equipo de sonido.
Centro de bienestar para los sentidos: el interior
La calidad de acabado del Audi Q5 es de máximo nivel, y su interior se muestra aún más refinado. Muchos elementos de mando incorporan delicadas abrazaderas cromadas, y los embellecedores de la consola central se han realizado en negro de brillo intenso. Todos los volantes presumen de un nuevo diseño. El MMI navigation plus se maneja ahora a través de sólo cuatro teclas, y el mando giratorio del volumen incorpora una función skip.
Otras modificaciones afectan al manejo de la calefacción de los asientos, del sistema de conducción dinámica Audi drive select y del volante multifuncional.
Para el Audi Q5 revisado se ofrecen tres nuevos colores de interior, así como tres tipos de cuero y otros tres de tela; en cuanto a las inserciones, hay tres laminados de madera y una variante en aluminio. El paquete deportivo S line viste el interior de color negro, y lo dota de asientos deportivos y de discretas aplicaciones que incrementan la exclusividad. La oferta de Audi exclusive y de Audi exclusive line proponen al cliente otras opciones de gran atractivo.
El Audi Q5 posee un gran talento para el día a día y el tiempo de ocio. Con su larga batalla de 2,81 metros, ofrece espacio más que suficiente para cinco pasajeros. Los respaldos de los asientos traseros se pueden regular en inclinación; cuando están abatidos, el volumen del maletero se incrementa de los 540 a los 1.560 litros. Opcionalmente el cliente puede optar por un sistema de rieles, una cubeta para utensilios sucios, una alfombrilla reversible, un portón del maletero de accionamiento eléctrico, un asiento del acompañante con respaldo abatible y la banqueta trasera plus desplazable longitudinalmente que incorpora dispositivo de carga larga. La carga de remolque es de hasta 2,4 toneladas, todo un récord en el segmento.
Una posición excepcional en la serie la ostenta el Audi Q5 hybrid quattro, el primer SUV híbrido del segmento con batería de iones de litio de serie. Un 2.0 TFSI con 211 CV (155 KW) y un motor eléctrico con hasta 54 CV (40 KW) de potencia conforman el sistema de propulsión; en conjunto entregan una potencia de sistema de 245 CV (180 KW) y un par motor de sistema de 480 Nm.
Ambos motores se encuentran montados uno detrás del otro y están conectados entre sí mediante un embrague. Sus fuerzas se trasladan hasta el sistema de tracción quattro a través de un tiptronic de ocho relaciones modificado. La batería de iones de litio situada en la parte trasera del vehículo acumula una energía nominal de 1,3 kWh, y se refrigera en función de las necesidades a través de dos vías.
El Audi Q5 hybrid quattro acelera de 0 a 100 km/h en 7,1 segundos. A una velocidad constante de 60 km/h es capaz de recorrer hasta 3 km en modo exclusivamente eléctrico, siendo su velocidad punta en este caso de 100 km/h. Su consumo medio asciende a sólo 6,9 litros de combustible a los 100 km. El SUV híbrido es capaz de circular únicamente con el TFSI, únicamente con el motor eléctrico, y en modo híbrido; además puede entrar en modo de recuperación o en modo de aceleración intensa (boost).
El conductor puede elegir entre tres programas. El grupo de características EV da prioridad al modo eléctrico, el programa D optimiza el consumo de ambos motores y el nivel S es el modo deportivo. Una serie de indicadores especiales informan sobre el sistema de propulsión actual y sobre el potencial en lo que respecta a la eficiencia.
Nuevo modelo de máxima potencia: el Audi SQ5 TDI
La nueva versión de máxima potencia en la serie Q5 es el SQ5 TDI, el primer modelo S de Audi equipado con un motor diésel. Dos turbocompresores conectados en serie ayudan al 3.0 TDI a conseguir su impresionante fuerza; rinde 313 CV (230 KW) y genera un par motor de 650 Nm. Un actuador de sonido integrado en el sistema de escape aporta al diésel V6 un sonido deportivo y armonioso.
El Audi SQ5 TDI resuelve la aceleración de 0 a 100 km/h en 5,1 segundos y alcanza una velocidad punta de 250 km/h; el consumo medio asciende a sólo 7,2 litros a los 100 km. El tren de rodaje deportivo rebaja 30 mm la altura de la carrocería, las ruedas tienen un formato de 20 pulgadas. Opcionalmente se ofrecen diámetros de hasta 21 pulgadas.
Equipamiento y precios
A pesar de la amplia revaloración que ha sufrido el Audi Q5, que llegará a los concesionarios a finales de verano, el precio apenas se ha incrementado. En el caso del 2.0 TDI de 177 CV (130 KW), por ejemplo, la diferencia es apenas de 150 euros, siendo su precio básico de 39.900 euros. El modelo básico, con un precio de 35.200 euros, es el 2.0 TDI de 143 CV (105 KW).
El equipamiento de serie es generoso. Incluye, por ejemplo, los faros antiniebla, el paquete de brillo, una baca, un climatizador automático, la radio chorus con display de 6,5 pulgadas, seis airbags, el sistema integral de reposacabezas y el freno de estacionamiento electromecánico. El Q5 hybrid quattro dispone además del MMI navigation plus, mientras que el SQ5 TDI monta faros xenón plus y el sistema de conducción dinámica Audi drive select.
Los equipamientos opcionales para el Q5 proceden directamente del segmento de lujo. Entre ellos se cuentan el sistema adaptive light, la llave de confort, el techo de cristal panorámico, el climatizador automático de tres zonas y los asientos climatizados de confort con función de ventilación. El paquete deportivo S line incluye un tren de rodaje deportivo y un color exclusivo para la carrocería, el Gris Daytona efecto perla.
Relación de detalles interesantes
Diseño y carrocería
- Carrocería SUV deportiva con línea de techo plana y portón del maletero
envolvente, nuevos detalles en el frontal y en la trasera
- Faros xenón plus con luz diurna LED y grupos ópticos traseros LED opcionales
- Capó del motor y portón trasero fabricados en aluminio
Motores
- Tres motores TDI y dos TFSI, todos con inyección directa y sobrealimentación
- Potencia desde 143 CV (105 KW) hasta 272 CV (200 KW)
- 2.0 TFSI y 3.0 TDI completamente nuevos
- Reducción del consumo en hasta un 15%; el 2.0 TDI sólo consume 5,3 litros a
los 100 km
- Q5 hybrid quattro con 2.0 TFSI y motor eléctrico, potencia de sistema 245 CV
(180 KW)
- Audi SQ5 TDI con 313 CV (230 KW), aceleración de 0 a 100 km/h en
5,1 segundos
Transmisión de fuerza
- En función de la motorización, cambio manual de seis marchas, S tronic o
tiptronic
- Tracción integral permanente quattro con gestión del par individual para cada
rueda para casi todas las motorizaciones
Tren de rodaje
- Configuración mejorada, nueva servodirección electromecánica
- Opcionalmente, sistema de conducción dinámica Audi drive select, dirección
dinámica y tren de rodaje con regulación de la amortiguación
- Grandes ruedas de entre 17 y 20 pulgadas, y de hasta 21 pulgadas en el
SQ5 TDI
Habitáculo
- Numerosos refinamientos en el diseño interior y en el manejo
- Nuevos colores, telas, tipos de cuero e inserciones decorativas
- Espacioso habitáculo, maletero con un volumen de hasta 1.560 litros
Equipamiento
- Generoso equipamiento de serie, a lo que se suman muchos equipamientos
opcionales
- Ultramodernos sistemas de asistencia al conductor, entre ellos adaptive cruise
control, Audi active lane assist y Audi side assist
- Atractivos componentes de infotainment que llegan hasta el MMI navigation
plus y el teléfono de automóvil Bluetooth online para los servicios de Internet
de Audi connect
El Audi Q5 aúna la deportividad de una berlina con un habitáculo variable y muchas soluciones prácticas para el tiempo de ocio y el día a día. En la remodelación Audi ha pulido aún más el perfil de su SUV de altas prestaciones, tanto en el diseño como en el infotainment, en los sistemas de asistencia y en los motores. El Audi Q5 hybrid quattro sorprende por su reducido consumo, y el nuevo SQ5 TDI, el primer modelo S de Audi con un motor diésel, completa la oferta de los modelos más potentes.
El diseño exterior
El Audi Q5 se caracteriza por sus deportivas proporciones; su carrocería con las fluidas líneas y las superficies atléticamente arqueadas parece haber sido esculpida de una sola pieza. La línea tornado, que transcurre por debajo de las ventanillas laterales, forma sobre las ruedas unos bordes afilados. El portón trasero envuelve la carrocería, algo que se ha convertido ya en una característica típica de los modelos Q de Audi.
La línea del techo traza un arco poco pronunciado que inicia pronto su descenso, mientras que los montantes A y C se encuentran muy inclinados. El paquete de brillo de serie aporta alrededor de las ventanillas ese toque especial, y un spoiler alarga visualmente la línea del techo. El equipamiento de serie incluye las barras longitudinales del techo en aluminio anodizado (o en color negro con carácter opcional) y largueros transversales. La remodelación apenas ha supuesto modificaciones en las dimensiones: el Q5 mide 4.629 mm de largo, 1.898 mm de ancho y 1.627 mm de alto. Su batalla mide 2.812 mm y los voladizos resultan cortos.
El diseño, sin embargo, se ha vuelto más llamativo en numerosos detalles, y el frontal parece más plano y ancho. La parrilla Singleframe en negro de brillo intenso tiene ahora seis esquinas, sus barras cromadas verticales y los aros Audi se caracterizan por sus formas expresivas.
El paragolpes también es nuevo, e integra grandes entradas de aire con inserciones en color negro de brillo intenso. Unos anillos cromados rodean los faros antiniebla de serie.
Los nuevos faros otorgan al Audi Q5 una mirada decidida. En los faros xenón plus, disponibles con carácter opcional, la luz diurna LED altamente eficiente dibuja una horquilla delgada y aparentemente homogénea que sigue casi por completo el contorno exterior. A petición del cliente Audi equipa el Q5 con el sistema adaptive light, que integra una luz de curva y de giro dinámica.
Los grupos ópticos traseros no están divididos; si se combinan con los faros xenón plus, también se presentan con bandas de luz LED envolventes. Dado que los grupos ópticos traseros no se pueden ver con el portón abierto, el Q5 incorpora luces adicionales en el paragolpes.
El embellecedor del difusor también es de nuevo diseño. Los tubos de escape finales se han dotado de embellecedores cromados y están achatados en la parte inferior. Los diésel de dos litros presentan un tubo en el lado izquierdo, mientras que el resto de motorizaciones tienen tubos de escape en los dos lados.
Soluciones para individualistas: colores y piezas accesorias
Audi ofrece la versión remodelada del Q5 en 15 colores de carrocería, cuatro de los cuales han sido nuevamente mezclados. Los colores sólidos se denominan Negro brillante y Blanco ibis. Las pinturas metalizadas se llaman Plata Ártico, Plata cuvée, Plata hielo, Blanco glaciar, Marrón maya, Azul lunar, Gris monzón, Azul scuba, Marrón teca y Rojo volcán. Los colores efecto perla Gris lava, Negro phantom y Gris Daytona (para el paquete deportivo S line) completan la oferta. Con carácter opcional Audi puede pintar el SUV en cualquier color que el cliente desee.
Para las piezas exteriores, como la parte inferior de los paragolpes y las molduras de las puertas, se ofrecen tres versiones. La versión de serie se realiza en color negro, pero si el cliente lo desea, pueden pintarse en un color de contraste o en el color de la carrocería.
Otra alternativa deportiva es el paquete de diseño Audi exclusive en negro (no disponible para el 2.0 TDI con tracción delantera).
Para los amantes de una imagen dinámica Audi ha creado el paquete exterior
S line, que presenta deportivos retoques en los paragolpes, en las rejillas de las entradas de aire y en el embellecedor del difusor de color gris platino.
Las molduras de las puertas son del color de la carrocería, y el spoiler del borde del techo es más largo. Las inscripciones S line decoran las aletas y las molduras de acceso, y la protección para el borde de carga resplandece en acero inoxidable.
Como alternativa, el paquete de diseño Offroad del programa Audi exclusive otorga al Q5 una imagen marcadamente robusta. En este caso las modificaciones también afectan a los paragolpes, a las rejillas de las entradas de aire, a las molduras de las puertas, a las molduras de acceso y a la protección del borde de carga. Se han utilizado molduras de plástico para ensanchar los pasos de rueda, y revestimientos de acero inoxidable que actúan como protección de los bajos en el frontal y en la trasera. El paquete de diseño Offroad está disponible en combinación con las grandes ruedas del programa Audi exclusive.
La carrocería
El peso en vacío del Audi Q5 2.0 TDI con 143 CV (105 KW) es, sin conductor, de 1.680 kg, un excelente valor en el segmento. La carrocería obtuvo ya en su lanzamiento al mercado, hace cuatro años, el Euro Car Body Award, el galardón más prestigioso del mundo en materia de construcción de carrocerías.
La carrocería del Audi Q5 presenta una inteligente mezcla de materiales. El portón trasero y el capó del motor se han realizado en aluminio; sólo el portón pesa 8,1 kg menos que el mismo componente fabricado en acero. El travesaño delantero y sus cajas de choque son perfiles de aluminio que en conjunto pesan menos de 5,0 kg.
El habitáculo integra en muchas zonas aceros endurecidos en molde, que adquieren su extremada resistencia a la tracción mediante un brusco cambio de temperatura durante el proceso de conformación. Estos aceros requieren grosores de pared reducidos, por lo que son más ligeros. En total pesan 44 kg, 15 kg menos que los componentes convencionales. Los tailored rolled blanks (chapas laminadas con diferentes grosores) en la zona trasera del piso reducen el peso 1,9 kg.
En la carrocería en bruto del Q5, sin puertas, portones ni chapa, los aceros endurecidos en molde constituyen el 9,1% del peso total. Un 3,3% de ellos son aceros de máxima resistencia, un 12,3% aceros muy resistentes, un 44,5% aceros de resistencia alta y un 30,8% aceros de embutición profunda.
Precisión a la décima de milímetro: la construcción de la carrocería
En el ensamblaje de las carrocerías Audi apuesta por una precisión a la décima de milímetro. En muchos ámbitos se utilizan adhesivos técnicos para reforzar las uniones, así como la soldadura láser en las taloneras y en las puertas. Los componentes de las zonas visibles del canal de agua en la zaga, así como la pieza lateral y el techo, se unen mediante procesos de soldadura de alta tecnología con aportación de material; la junta prácticamente invisible que se genera es una muestra de la filosofía de calidad de la marca.
La elevada rigidez de la carrocería constituye la base para la ausencia de ruido a bordo, para la confortable rodadura y para la maniobrabilidad precisa y deportiva. La protección de los ocupantes también se encuentra al más alto nivel. En caso de producirse una colisión frontal, el travesaño delantero distribuye las fuerzas entre el larguero superior y el inferior. El bastidor auxiliar de aluminio para el eje delantero y el motor desvía las fuerzas hasta la estructura del suelo y del túnel. Si la colisión es trasera, los largueros, las ruedas traseras y las taloneras absorben la energía del impacto. En caso de una colisión lateral, los montantes B, los estribos laterales y dos travesaños en el suelo se encargan de realizar la mayor parte del trabajo de deformación.
Los sistemas de retención del Q5 se han adaptado con precisión al comportamiento de deformación de la carrocería. Cuando se produce un choque frontal determinan, con ayuda de sensores, la posición del asiento del conductor y del acompañante, y la incluyen como una magnitud más en proceso de activación, de modo que ofrecen una estupenda protección a personas de todas las estaturas. Al chocar contra un peatón, el Audi Q5 satisface todas las normativas relevantes gracias a las grandes áreas de deformación y a una zona acolchada detrás del paragolpes. Hasta una velocidad de impacto de unos 15 km/h, las cajas de choque de aluminio situadas delante de los largueros se encargan de que la estructura de la carrocería no sufra daños.
Con su coeficiente de resistencia aerodinámica de 0,32 (ó 0,33), obtenido gracias a las intensivas medidas de optimización en la capa exterior, en los bajos y en el vano motor, el Audi Q5 sienta un claro precedente. Su superficie de penetración mide 2,65 m2. La compleja aeroacústica garantiza un reducido nivel de ruido incluso a altas velocidades. En ello repercuten detalles como las juntas triples de las puertas, las canaletas vierteaguas en los montantes A y el diseño de los retrovisores exteriores.
El interior y el maletero
El interior del Audi Q5 resulta deportivo, su diseño elegante y luminoso, y el manejo, ya sencillo de por sí, se presenta mejorado. Los volantes son de nuevo diseño, con cuatro o tres radios en diseño Q; opcionalmente se pueden solicitar con una corona achatada en la parte inferior, con teclas multifunción en un orden nuevo y con levas de cambio. En los vehículos equipados con caja de cambios automática, el cambio al programa S con la palanca de selección es ahora más sencillo, ya que basta con un solo toque.
El nuevo climatizador automático altamente eficiente también presenta mejoras; la función opcional de calefacción y ventilación de asientos se puede seleccionar directamente en tres niveles a través de teclas. Los displays en la consola central se iluminan de color blanco, las agujas de los instrumentos son más elegantes, las palancas en la columna de dirección y la llave de encendido presumen de nuevos diseños.
El MMI navigation plus disponible con carácter opcional ahora sólo tiene cuatro teclas fijas, para los ámbitos de navegación, teléfono, radio y media. El mando giratorio del volumen incorpora una función skip para pasar de un título a otro. Para el manejo del sistema de conducción dinámica Audi drive select, otro de los equipamientos opcionales, basta ahora una sola tecla.
Los asientos delanteros, ambos con regulación de altura, ofrecen al cuerpo una excelente sujeción y apoyo. El equipamiento de serie incluye un reposabrazos central desplazable con compartimento portaobjetos y portabebidas. A petición del cliente Audi ofrece los asientos con regulación eléctrica, también con función de memoria en el lado del conductor, y un apoyo lumbar eléctrico de cuatro posiciones. La calefacción de asientos opcional también está disponible para las plazas exteriores traseras.
Un equipamiento especialmente lujoso son los asientos climatizados de confort, caracterizados por su suave acolchado y por los tapizados de cuero perforado. Una serie de pequeños ventiladores permiten ventilarlos en seis niveles; si el descenso de temperatura amenaza con ser excesivo, la calefacción se conecta automáticamente. Como alternativa, en el paquete deportivo S line, en la Audi exclusive line y en algunos paquetes de diseño se incluyen asientos deportivos con apoyo lumbar y cojines extraíbles.
Todos los pasajeros del Q5 disfrutan de mucho espacio para la cabeza, los brazos, las piernas y los pies, y el acceso al vehículo también es muy confortable. La inclinación de los respaldos de la banqueta trasera se puede regular entre los 24 y los 30 grados, los reposacabezas en forma de L no obstaculizan la vista en el retrovisor interior. Los portabebidas climatizados y un versátil paquete portaobjetos, disponibles con carácter opcional, hacen la vida aún más cómoda a bordo del Q5.
La selección y el empleo de los materiales reflejan la incondicional filosofía de calidad de Audi; el interior del Q5 es ahora aún más refinado. La cubierta del cuadro de instrumentos es gris, mientras que la inserción que en la consola central rodea el climatizador automático y la radio se ha pintado en color negro de brillo intenso.
Los elementos de mando para el climatizador y el infotainment, las teclas del elevalunas, los difusores de aire y el interruptor de regulación de los retrovisores incorporan discretas abrazaderas cromadas.
Las inserciones decorativas del Audi Q5 se realizan de serie en material plástico, en los colores monometálico platino y monometálico beige trufa. Opcionalmente se ofrece el aluminio y tres tipos de madera: raíz de nogal marrón balsámico, madera de fresno marrón natural y el elegante laminado de madera de roble Beaufort. El lacado brillante negro, el plástico reforzado con fibra de carbono (CFRP) y seis delicadas maderas del programa Audi exclusive completan la oferta.
Elegantes: nuevos colores en el interior
La paleta de colores en el interior se presenta elegantemente combinada; todos los tonos son nuevos, con excepción del negro. Muchos elementos de los asientos, del tablero de instrumentos y de los revestimientos de las puertas se han realizado en negro, marrón castaño, gris titán y beige pistacho o beige trufa. La moqueta es de color negro, gris acero o beige, y el revestimiento interior del techo de color plata, beige o negro. En los tapizados se suma a todo ello la combinación negro/marrón maya.
Como alternativa a la tela como material de la tapicería, Audi ofrece el cuero Milano y el cuero napa fina, así como una combinación de Alcantara y cuero. Un gran número de paquetes de cuero y de composiciones del programa Audi exclusive, entre ellos el cuero de alta calidad Valcona, completan la oferta. Para el revestimiento interior del techo se puede optar por el material Alcantara en dos colores. En el programa Audi exclusive el cliente encontrará más propuestas de personalización, entre ellas la Audi exclusive line. Su color básico es el negro, con los asientos deportivos tapizados en cuero napa fina de dos colores; las bandas centrales son de color blanco alabastro, cognac y gris nube.
El paquete deportivo S line inunda el habitáculo de negro. Para los tapizados se ofrece una mezcla de tela y cuero, una combinación de Alcantara y cuero y el cuero napa fina; los respaldos incorporan inscripciones S line grabadas.
Las costuras en color contrastado gris (no disponibles con el cuero napa fina) aportan el toque especial. En el volante, en la palanca de cambio o de selección y en las alfombrillas también se pueden apreciar detalles de gran delicadeza. Las inserciones decorativas se realizan en aluminio cepillado mate o en lacado brillante. Los asientos deportivos, el tren de rodaje deportivo S line, las ruedas de 19 pulgadas, los emblemas en la carrocería y en las molduras de acceso, así como la protección para el borde de carga en acero inoxidable, completan el paquete deportivo S line.
Amplio: el maletero
El maletero del Audi Q5 ofrece en sus medidas básicas un volumen de 540 litros, su borde de carga se encuentra a una altura de sólo 69 cm, y queda prácticamente a ras del suelo de carga. El ancho de carga mide 105 cm, y la longitud de carga 93 cm. En él caben sin problema cuatro bolsas de golf, y la carga máxima permitida asciende a 580 kg. El equipamiento de serie incluye una red divisoria, una toma de corriente de 12 V, ganchos para bolsas abatibles y cuatro argollas de amarre.
El maletero se puede ampliar cómodamente mediante las dos manillas situadas en las paredes laterales. Al tirar de ellas, los respaldos divididos de los asientos traseros caen por sí solos sobre los cojines, ya que están pretensados con resortes. Si se accionan las manillas cuando los respaldos están abatidos, estos vuelven a levantarse unos 45 grados. El espacio de carga ampliado ofrece un volumen de 1.560 litros y una longitud de carga de 170 cm.
Debajo del suelo de carga extraíble hay un compartimento adicional que puede equiparse con una cubeta para utensilios sucios. Otros equipamientos opcionales son el portón trasero con accionamiento eléctrico, el sistema de rieles con set de fijación y una alfombrilla reversible. La banqueta trasera plus, disponible con carácter opcional, se puede desplazar 100 mm longitudinalmente, e incorpora dispositivo de carga larga; como complemento se ofrece una bolsa para esquís y snowboards. El asiento del acompañante con respaldo abatible, que amplía considerablemente el volumen de carga, se cuenta también entre los equipamientos opcionales.
El programa de accesorios ofrece diferentes soportes para el trasporte de bicicletas, kayaks, tablas de surf y esquís. En función de la motorización, el Audi Q5 puede arrastrar remolques de hasta 2,4 toneladas de peso (con una pendiente del 12%).
Los motores
La oferta de motores del Q5 concentra todo el conocimiento tecnológico de Audi. Los tres TDI y los dos TFSI han reducido su consumo en hasta un 15%, a pesar de que la mayoría de los motores han incrementado su potencia y su par motor. Todos ellos son motores de inyección directa sobrealimentados con una extraordinaria fuerza de arrastre. El sistema de arranque y parada, que funciona también a bajas temperaturas gracias a una eficiente batería, se incluye de serie en todas las motorizaciones, e incluso el ventilador del radiador ha sido optimizado en beneficio de la eficiencia.
El 2.0 TDI modificado, con una cilindrada de 1.968 cc, está disponible en dos versiones. Sus sutilezas técnicas son la reducida fricción interna, el turbocompresor con los álabes variables y el péndulo centrífugo en el volante bimasa. Éste último hace aún más suave la marcha del motor a bajas revoluciones, lo que permite cambiar más pronto a una marcha superior, y con ello una conducción más eficiente.
En su primera versión, el 2.0 TDI rinde 143 CV (105 KW) de potencia y 320 Nm de par, una fuerza de arrastre que está disponible entre las 1.750 y las 2.500 rpm. De media, el cuatro cilindros consume 5,3 litros de diésel a los 100 km, lo que equivale a unas emisiones de CO2 de 139 g/km. La aceleración de 0 a 100 km/h requiere 10,9 segundos, y la velocidad punta se sitúa en los
192 km/h.
La segunda variante del dos litros genera 177 CV (130 KW) y 380 Nm de par, también disponibles entre las 1.750 y las 2.500 rpm. En combinación con el S tronic, la aceleración de 0 a 100 km/h requiere 9,0 segundos, y la velocidad máxima alcanza los 200 km/h. El potente 2.0 TDI se basta con una media de 6,0 litros de combustible a los 100 km (159 gramos de CO2 por km).
El más potente de los motores diésel es el 3.0 TDI completamente revisado, con una cilindrada de 2.967 cc. Sus principales características son el reducido peso, de poco más de 190 kg, la distribución de cadena, diseñada para consumir menos energía, la reducida fricción interior, la bomba de aceite regulada en función de la demanda y la compleja gestión térmica. Tanto el cárter del cigüeñal como las culatas disponen de su propio circuito de refrigeración de agua, y ambos circuitos están conectados entre sí a través de válvulas.
El diésel V6 rinde 245 CV (180 KW) de potencia y genera 580 Nm de par en el cigüeñal entre 1.750 y 2.750 rpm. Acelera al Q5 hasta los 100 km/h, con salida parada, en 6,5 segundos, y le permite alcanzar una velocidad punta de 225 km/h. De media sólo consume 6,4 litros de combustible a los 100 km, lo que equivale a unas emisiones de CO2 de 169 g/km.
Completamente nuevo: el 2.0 TFSI
Los motores de gasolina también aúnan una extraordinaria potencia con una asombrosa eficiencia. El 2.0 TFSI, con una cilindrada de 1.984 cc, presenta un desarrollo completamente nuevo, con nuevas e innovadoras soluciones en mucho ámbitos técnicos. No en vano es el sucesor de aquel otro motor que obtuvo en cinco ocasiones consecutivas el título de Motor del año.
El nuevo cuatro cilindros traza una curva de par similar a la de un TDI; alcanza su máximo de 350 Nm ya a 1.500 rpm y las mantiene constantes hasta las 4.500 rpm. Ya a 4.500 rpm entrega toda su potencia de 225 CV (165 KW).
El 2.0 TFSI acelera al Audi Q5 equipado con cambio manual hasta los 100 km/h, con salida parada, en 7,6 segundos (tiptronic: 7,1 segundos) y le permite alcanzar una velocidad máxima de 222 km/h. Su consumo medio a los 100 km es de apenas 7,6 litros de combustible (con tiptronic: 7,9 litros), lo que equivale a unas emisiones de CO2 de 176 (184) g/km.
Entre las innovaciones del 2.0 TFSI se cuenta una inyección indirecta adicional. Complementa a la inyección directa FSI en régimen de carga parcial, reduciendo el consumo y las emisiones de partículas. La inyección FSI, que funciona con una presión de hasta 200 bares, entra en acción en el arranque y con cargas elevadas.
En cuanto al llenado de las cámaras de combustión, los ingenieros han conseguido unos niveles de libertad inéditos hasta el momento. Los dos árboles de levas se pueden regular en función de la demanda; en el lado de escape, el Audi valvelift system varía además la alzada de las válvulas en dos fases.
La innovadora gestión térmica integra dos distribuidores giratorios, agrupados en un módulo, que regulan el flujo del líquido refrigerante. Estos elementos se encargan de que el aceite del motor alcance rápidamente la temperatura óptima, y ajustan la temperatura del líquido refrigerante, en función de cada situación, entre los 85 y los 107 ºC. Sea cual sea la carga y el régimen, consiguen siempre la mejor relación entre una mínima fricción y un elevado rendimiento termodinámico.
El colector de escape del cuatro cilindros está integrado en la culata, donde es bañado por líquido refrigerante. Esta solución reduce la temperatura de los gases de escape y con ello el consumo al conducir de un modo deportivo, dado que se puede suprimir el enriquecimiento a plena carga. El turbocompresor también es de nuevo desarrollo. Su gran mejora es un nuevo actuador eléctrico de descarga que regula la presión de carga de un modo especialmente rápido y exacto, lo que hace que la respuesta del motor sea aún más espontánea.
También ha disminuido significativamente la fricción interna gracias a un novedoso recubrimiento de las camisas de los pistones y al rodamiento de los dos árboles de equilibrado, que garantizan un funcionamiento muy refinado. La bomba de aceite regulada requiere muy poca energía.
El gasolina más potente: el 3.0 TFSI con sobrealimentación por compresor
El motor de gasolina más potente del Q5 es el nuevo 3.0 TFSI, que sustituye al motor atmosférico de 3,2 litros. Su compresor, accionado por el cigüeñal a través de una correa, se encuentra en la V de 90º que forman las bancadas de cilindros. En su interior giran dos rotores a más de 20.000 rpm; la distancia entre ambos es de apenas unas micras. El compresor mecánico comprime el aire de admisión hasta los 0,8 bares, y a continuación vuelve a ser refrigerado por dos radiadores del aire de sobrealimentación.
El compresor se encuentra detrás de la mariposa, lo que mejora su eficiencia. Dado que los conductos de gases detrás de él son cortos, el par motor se establece pronto y rápido. Diferentes medidas insonorizan los ruidos del compresor; en el cárter del cigüeñal de aleación ligera del motor, un árbol de equilibrado incrementa el refinamiento de marcha. Los árboles de levas de admisión regulables y las mariposas en los canales de aspiración garantizan un óptimo llenado de las cámaras de combustión.
El 3.0 TFSI, con una cilindrada de 2.995 cc, es un motor potente y sonoro. Rinde 272 CV (200 KW) de potencia y genera 400 Nm de par entre las 2.150 y las 4.780 rpm. La aceleración estándar se lleva a cabo en 5,9 segundos, la velocidad máxima alcanza los 234 km/h. El consumo normalizado se limita a 8,5 litros de combustible a los 100 km, lo que equivale a unas emisiones de CO2 de 199 g/km.
La transmisión de fuerza
Cada variante del Q5 sale de fábrica con la transmisión de fuerza que mejor se adapta a sus características: con el cambio manual de seis marchas, el deportivo S tronic de siete velocidades y el cómodo tiptronic de ocho relaciones. Todos los cambios se caracterizan por un elevado grado de efectividad, un manejo preciso y un amplio desarrollo total: las marchas inferiores presentan una relación de transmisión corta y deportiva, mientras que las superiores son largas a fin de reducir el régimen. El diferencial está situado delante del embrague o delante del convertidor de par, con lo que el eje delantero se encuentra en una posición muy avanzada. Como resultado se obtiene una larga batalla y un equilibrado reparto de las cargas entre los ejes.
Las motorizaciones de cuatro cilindros equipan de serie el cambio manual. Su peso es bajo, y el soporte de las horquillas de cambio aísla la palanca de cambio de las oscilaciones. El sistema de información al conductor con programa de eficiencia, de serie en el Q5, incorpora en este caso indicador de cambio de marcha. Los cambios manuales están integrados en la gestión térmica de los motores.
Un serpentín de calefacción en el intercambiador de calor se encarga de que el aceite del cambio alcance temperatura rápidamente después del arranque en frío; cuando el líquido refrigerante del motor está lo suficientemente caliente, una parte pasa a la caja de cambios.
El tiptronic de ocho relaciones, de serie en el 3.0 TFSI y opcional en el 2.0 TFSI, es nuevo en la serie Q5. Uno de los componentes que aporta su elevado rendimiento a la caja de cambios automática, de cambios rápidos y muy confortables, es la ultraeficiente bomba de aceite, y otro de ellos es la calefacción del aceite del cambio en el marco de la gestión térmica. Un acumulador hidráulico garantiza la función de arranque y parada: al ponerse el motor de nuevo en marcha, su volumen de aceite es presionado en el sistema, con lo que el tiptronic está listo para funcionar en muy poco tiempo.
El S tronic de siete velocidades se monta de serie en el 3.0 TDI, y está disponible como opcional para el 2.0 TDI de 177 CV (130 KW). La transmisión de fuerza más deportiva en el Q5 se compone de dos engranajes parciales que son accionados por dos embragues. Los procesos de cambio directo de una marcha a otra se llevan a cabo mediante el cambio de los dos embragues; apenas duran unas centésimas de segundo y se producen de forma casi imperceptible. Como en el caso del tiptronic de ocho relaciones, el control del S tronic ofrece un modo completamente automático con los modos D (Drive) y S (Sport); como alternativa, el conductor puede cambiar de marcha manualmente.
La tracción integral permanente quattro pertenece al equipamiento de serie de todas las motorizaciones, con excepción del 2.0 TDI de 143 CV (105 KW), de tracción delantera. El componente central de la tracción quattro es el diferencial central autoblocante. En condiciones de marcha normales distribuye las fuerzas del motor enviando un 40% al eje delantero y un 60% al trasero. Si una de las ruedas de un eje patina, la mayor parte de las fuerzas se dirige al otro eje; hasta un 70% se puede desviar al tren delantero y hasta un 85% al trasero.
La gestión del par individual para cada rueda es el complemento ideal de la tracción quattro. Al circular rápidamente por una curva, este software inteligente es capaz de detectar si una de las ruedas situadas en el interior de la curva está a punto de perder el agarre.
Antes de que esto suceda el sistema frena la rueda con una mínima intervención casi imperceptible, con lo que mejora la maniobrabilidad y la conducción se vuelve más segura.
El tren de rodaje
Gracias a su tren de rodaje dinámico, el Audi Q5 es el SUV más deportivo de su segmento. Presenta ahora una nueva configuración aún más equilibrada, tanto en la línea característica de los muelles, como de los amortiguadores y de las barras estabilizadoras.
El eje delantero de cinco brazos, con un ancho de vía de 1.617 mm (2.0 TDI con tracción delantera: 1.625 mm), puede procesar por separado las fuerzas longitudinales y transversales. En sentido transversal, sus soportes se han ajustado de manera rígida en beneficio de la precisión deportiva, mientras que en sentido longitudinal la configuración es más cómoda.
Con el firme objetivo de reducir las masas no suspendidas, muchos componentes de la suspensión de las ruedas delanteras se han fabricado en aluminio. En concreto, el soporte integral del motor y del eje, que ha sido atornillado rígidamente a la parte delantera del vehículo con el fin de aumentar la rigidez, el soporte del cojinete, que une los brazos superiores del eje con la carrocería, el cojinete giratorio y los cinco brazos por rueda. También el estabilizador tubular contribuye a reducir el peso.
La nueva servodirección electromecánica no requiere ningún tipo de energía al circular en línea recta, con lo que reduce el consumo de combustible en hasta 0,3 litros a los 100 km. Su motor eléctrico está integrado en el mecanismo de la dirección de tal modo que ahorra espacio y peso. La nueva dirección, que adapta su asistencia a la velocidad a la que se circula, presenta una relación de transmisión directa de 15,9:1, al tiempo que su repuesta es espontánea y diferenciada. El diámetro de giro del Audi Q5 mide alrededor de 11,6 m.
El eje trasero es una construcción de brazos trapezoidales con control de vía que combina una reducida necesidad de espacio con unas majestuosas propiedades en marcha. Un portaeje fabricado en acero, unido a la carrocería a través de grandes soportes de caucho, constituye el elemento central de alta resistencia.
Los brazos trapezoidales, los portarruedas, los brazos transversales superiores y las barras de dirección se han fabricado en aluminio. Como en el eje delantero, también aquí se ha optimizado el peso del estabilizador tubular.
Los muelles se apoyan directamente sobre los portarruedas y están separados de los amortiguadores de gas presurizado, de modo que pueden reaccionar con especial sensibilidad. A petición del cliente Audi monta el rígido tren de rodaje deportivo S line (de serie con el paquete deportivo S line). En el caso del
Q5 2.0 TDI con 143 CV (105 KW) y del Q5 hybrid quattro, la carrocería se encuentra generalmente 25 mm más baja. El ancho de vía en el eje trasero mide 1.614 mm (2.0 TDI con 143 CV: 1.620 mm).
Cinco automóviles en uno: Audi drive select
Cada automóvil tiene su propio carácter, pero el Audi Q5 puede tener hasta cinco si se le equipa con el sistema de conducción dinámica Audi drive select. En su versión básica permite al conductor influir en la línea característica del pedal acelerador, en los puntos de cambio de marcha del cambio automático y en la asistencia de la servodirección. Para ello puede elegir entre cuatro modos de funcionamiento, denominados comfort, auto, dynamic y efficiency; en este último nivel, también las unidades de mando del climatizador y de la regulación de velocidad funcionan del modo más económico posible. Si el vehículo equipa un sistema de navegación MMI se dispondrá además del modo individual, que el conductor puede diseñar libremente dentro de unos determinados límites.
Si se desea se pueden integrar otros componentes en el sistema, como por ejemplo el tren de rodaje con regulación de la amortiguación. Sus amortiguadores CDC (del inglés continuous damping control) utilizan válvulas de accionamiento electromagnético para regular el flujo del líquido hidráulico entre los tubos de los amortiguadores.
La unidad de mando calcula el caudal para cada uno de los amortiguadores en intervalos de apenas unos milisegundos; para ello se basa en el estado de la calzada, el estilo de conducción y el modo seleccionado en el Audi drive select.
Otro componente opcional que se puede integrar en la gestión del Audi drive select es la dirección dinámica. El corazón de este sistema de alta tecnología, de funcionamiento también electromecánico, es una transmisión superpuesta que va integrada en la columna de dirección y que es accionada por un motor eléctrico. El denominado engranaje armónico puede variar la relación de dirección en casi un 100%.
En ciudad, la dirección dinámica funciona de un modo muy directo, mientras que a velocidades elevadas, por ejemplo en autovías, se vuelve más indirecta. Al alcanzar el límite de estabilidad en curva puede reducir al mínimo tanto el subviraje como el sobreviraje causado por la alternancia de cargas. Al frenar sobre superficies con diferentes coeficientes de rozamiento, el sistema evita que el coche se ladee.
De 17 a 20 pulgadas: las ruedas
El Q5 calza grandes ruedas de aleación ligera. En el 2.0 TDI su diámetro es de 17 pulgadas, con un formato de neumáticos de 235/65. En las motorizaciones a partir de 225 CV (165 KW) se utilizan ruedas de 18 pulgadas con neumáticos de tamaño 235/60. A petición del cliente, Audi y quattro GmbH ofrecen ruedas de hasta 20 pulgadas de diagonal y neumáticos de hasta 255/45. Los diseños aquí son especialmente atractivos, en color antracita y parcialmente pulidas o también en óptica de titanio. Las ruedas de invierno tienen un diámetro de 17 o de 20 pulgadas. El control de la presión de los neumáticos, de medición indirecta, y el set de reparación se incluyen de serie, y la rueda de repuesto plegable está disponible como opcional.
Los frenos del Audi Q5 son de grandes dimensiones. Los discos delanteros de las motorizaciones de cuatro cilindros tienen un diámetro de 320 mm, y los traseros de 300 mm.
En los frenos delanteros autoventilados, cientos de diminutos cubos metálicos unen las dos mitades del disco entre sí, y son capaces de evacuar una gran cantidad de aire caliente en muy poco tiempo. Con carácter opcional Audi complementa el freno de estacionamiento electromecánico de serie con un asistente de arranque.
Tanto el Q5 3.0 TDI como el 3.0 TFSI montan los cuatro discos autoventilados, con un diámetro de 345 mm delante y 330 mm detrás. Las pinzas fijas en construcción mixta de aluminio se caracterizan por su reducido peso y su elevada resistencia. En aquellos ámbitos con requisitos elevados se utiliza fundición nodular de grafito esferoidal de alta resistencia; la carcasa de los émbolos, fabricada en aluminio, disipa muy bien el calor.
El control de estabilización electrónico (ESC) del Q5 es un sistema ultramoderno. En combinación con la dirección electromecánica, el ESC ayuda al conductor en el contraviraje y en la frenada sobre firmes con diferente agarre de las ruedas a cada lado.
A través de un sensor detecta si hay barras transversales montadas en el techo, ya que desplazan el centro de gravedad del Q5 hacia arriba, y adapta sus maniobras de regulación correspondientemente. En el Q5 2.0 TDI de 143 CV (105 KW), el ESC integra el bloqueo transversal electrónico, un sistema informático que incrementa la estabilidad al trazar curvas a gran velocidad mediante mínimas intervenciones de los frenos en la rueda delantera situada en el interior de la curva.
Otra de las funciones integrada en el ESC, denominada offroad detection, detecta el estado del firme; el conductor la puede activar pulsando una tecla. Al acelerar en terreno inestable, el sistema mejora la propulsión tolerando más patinaje. En una pendiente pronunciada, el asistente para el descenso de pendientes, perteneciente también al equipamiento de serie, regula la velocidad de forma constante entre los 9 y los 30 km/h.
El Audi Q5 con tracción quattro también se desenvuelve a la perfección sobre terreno sin asfaltar. Sus ejes permiten un deslizamiento diagonal de hasta 160 mm y su capacidad ascensional, de 31 grados, es muy elevada. Gracias a sus cortos voladizos, el ángulo de entrada y de salida es en ambos casos de 25 grados. El ángulo ventral mide 17,6 grados y la inclinación transversal 25 grados. La altura libre sobre el suelo es de 20 cm, y es posible enfrentar profundidades de vadeo de hasta 50 cm.
Los sistemas de asistencia al conductor
En lo que respecta a los sistemas de asistencia, el Audi Q5 revisado también es líder en su segmento. Cabe mencionar en primer lugar el sistema de información al conductor de serie con recomendación de descanso, que se activa a partir de los 65 km/h. Este sistema observa los movimientos del volante y otros parámetros; si a partir de ellos detecta que la concentración del conductor disminuye, le propone que se detenga para tomarse un descanso.
Entre los sistemas opcionales, el más complejo es el adaptive cruise control. Entre los 30 y los 200 km/h, el ACC, sirviéndose de un radar, mantiene al Audi Q5 a la distancia deseada con respecto al vehículo precedente, y para ello acelera o frena por sí solo dentro de unos determinados límites. El conductor puede determinar la distancia y la dinámica de la regulación en varios niveles.
Cuando el ACC detecta el riesgo de una colisión por alcance con un vehículo en movimiento, el sistema pre sense front asiste al conductor y le advierte en varios niveles. Un gong y una señal roja constituyen la primera fase; el sistema de frenos se llena y las pastillas se aproximan a los discos. De este modo, si el conductor pisa el freno, la frenada se lleva a cabo prácticamente de inmediato. Si el conductor permanece pasivo, éste percibe en la segunda fase una sacudida de alerta causada por una breve deceleración. Si en ese momento el conductor frena, pero no pisa el pedal con la fuerza suficiente, el servofreno aumenta la fuerza de frenado de acuerdo con la situación.
En el caso de que el conductor siga sin reaccionar, el sistema ejecuta una frenada parcial autónoma que decelera al Q5 unos 3 m/s2, aproximadamente un tercio de lo posible. A velocidades inferiores a los 30 km/h, el SUV de altas prestaciones es capaz de frenar a fondo por sí solo en situaciones de emergencia, independientemente de si el vehículo que se encuentra delante está en movimiento o parado. Por debajo de los 20 km/h, esta frenada a fondo suele evitar por completo el accidente, mientras que en el resto de los casos reduce la velocidad del impacto y, con ello, la gravedad del accidente.
Vista por radar hacia atrás: el Audi side assist
El Audi side assist permite cambiar de carril de un modo más relajado. A partir de una velocidad de 30 km/h, los sensores de radar ubicados en la zaga del vehículo vigilan el tráfico que circula por detrás del Q5. Si otro vehículo se está moviendo en el ángulo muerto o se aproxima rápidamente por detrás, se enciende un LED de color amarillo en la carcasa del retrovisor exterior. Si aún así el conductor acciona el intermitente para cambiar de carril, aumenta el brillo del indicador y la frecuencia de parpadeo; una señal de advertencia muy llamativa.
El Audi active lane assist, que se activa a partir de los 65 km/h, reconoce las líneas de demarcación de la calzada a través de una pequeña cámara situada en el retrovisor interior. Si el Q5 pisa una línea sin activar el intermitente, el sistema advierte al conductor mediante una discreta intervención en la dirección electromecánica para que corrija el rumbo. El conductor puede decidir el momento en el que se debe producir la intervención y si se ha de llevar a cabo en combinación con una vibración en el volante. Si éste se decide por una corrección a tiempo, el sistema le ayuda a colocar el Q5 en el centro del carril.
Para aparcar cómodamente se ofrecen tres soluciones, siendo la más sofisticada de ellas el Audi parking system plus con cámara de marcha atrás. Graba la zona situada detrás del vehículo con un objetivo de ojo de pez que va integrado en el portón trasero. Las imágenes corregidas se muestran en el monitor del MMI complementadas con líneas y campos auxiliares que ayudan al conductor a realizar las maniobras de aparcamiento.
Los sistemas de infotainment
La oferta de sistemas de infotainment en el Audi Q5 presenta una estructura modular. El componente básico es la radio de serie chorus, que integra un reproductor de CD y un amplificador de 80 vatios de potencia que gestiona ocho altavoces. El equipo se rige por el concepto de manejo MMI de Audi e incorpora una pantalla monocromática de 6,5 pulgadas.
La primera fase evolutiva es el equipo de radio concert, que incluye además una conexión Aux-In, un lector de tarjetas SDHC y un monitor en color de 6,5 pulgadas. En el siguiente nivel se encuentra el equipo de radio symphony, con un cambiador de CD para seis unidades. El siguiente puesto lo ocupa el sistema MMI navigation, que obtiene los datos cartográficos de un DVD. El conductor puede introducir su destino a través de un comando por voz, y por el camino se puede dejar llevar por el sistema de guiado dinámico mediante TMC (Traffic message channel). El sintonizador triple garantiza una recepción de radio segura.
Componente de alta tecnología: MMI navigation plus
Liderando la oferta de sistemas de infotainment se encuentra el sistema MMI navigation plus, la gran central mediática de Audi. Además de un reproductor de DVD para asegurar el entretenimiento integra un disco duro de 60 GB de capacidad para los datos de la navegación y del teléfono y los archivos de música. Un procesador gráfico de la empresa colaboradora de Audi NVIDIA genera las imágenes tridimensionales con una calidad excelente. En el modelo geodésico en 3D que se utiliza como mapa, los edificios más importantes de muchas ciudades aparecen representados con gran lujo de detalles.
El monitor de 7,0 pulgadas del sistema MMI navigation plus sorprende por su alta resolución de 800 x 480 píxeles, y muestra imágenes de extraordinaria nitidez y colores brillantes. Con el control por voz evolucionado, el conductor puede introducir el lugar y la calle en un solo comando, y manejar también el teléfono y la reproducción de música.
A través de la interfaz Bluetooth el sistema vincula teléfonos móviles y reproductores portátiles, de modo que también puede reproducir la música de estos dispositivos.
Otros componentes complementan la oferta de infotainment: un sintonizador doble para la recepción de radio digital, un sintonizador de TV, un cambiador de CD en la guantera y la Audi music interface como punto de conexión para un reproductor móvil o un iPhone. La interfaz Bluetooth y la preinstalación para teléfono móvil Bluetooth con dispositivo manos libres y control por voz hacen más cómodo hablar por teléfono. El Audi Entertainment mobile, un equipamiento del programa de accesorios, incluye una o dos tabletas de 9,0 pulgadas con mando a distancia y reproductor de DVD que se pueden fijar a los respaldos de los asientos delanteros.
Los amantes de la alta fidelidad pueden optar por el Audi Sound System, con un amplificador de seis canales y 180 vatios de potencia al que se conectan diez altavoces, entre ellos un subwoofer y un altavoz central. Pero mejor calidad de sonido ofrece aún el Bang & Olufsen Sound System. Su amplificador de diez canales rinde 505 vatios y gestiona 14 altavoces de alto rendimiento, cuyas cubiertas incorporan aplicaciones de aluminio. En colaboración con el MMI navigation plus, este equipo puede reproducir DVD en calidad de sonido 5.1 Surround Sound.
Audi connect
Bajo el término Audi connect la marca engloba todas las aplicaciones y desarrollos que conectan a sus automóviles con Internet, con el propietario, con la infraestructura y con otros vehículos. El módulo de hardware necesario es el teléfono de automóvil Bluetooth online, que sirve como complemento del sistema MMI navigation plus; establece la conexión a Internet a través de un módulo UMTS.
Su manejo se lleva a cabo a través del terminal MMI, del volante multifuncional o del control por voz. Tanto la conexión telefónica como la transferencia de datos se producen a través de la antena del techo; todos los datos se codifican conforme al estándar WPA2.
Para conectarse a la red el conductor sólo tiene que introducir en el lector de tarjetas una tarjeta SIM vinculada a una línea de datos; como alternativa puede conectar su teléfono móvil a través del perfil de acceso SIM.
El punto de acceso inalámbrico WLAN, un elemento integrado en el sistema, permite a los pasajeros conectar al Q5 hasta ocho terminales móviles; de este modo pueden navegar por Internet y acceder a su correo electrónico en todo momento.
Para el conductor se ofrecen servicios personalizados, entre los que destaca la información sobre viajes o el tiempo. En la página www.myAudi.de, el conductor puede planificar previamente la ruta desde el ordenador de casa, guardarla en su perfil personal y descargarla en el automóvil antes de emprender la marcha. Si quiere puede complementar el mapa con imágenes aéreas y de satélite de Google Earth.
Especialmente interesante es la Información de tráfico Audi online, que ofrece datos sobre la densidad actual del tráfico en el mapa de navegación. Si la ruta seleccionada está libre, aparece coloreada en verde, en caso de tráfico denso o lento en amarillo y si hay atascos en rojo. En este último caso el servicio indica la incidencia mediante un texto y calcula una ruta alternativa.
El sistema de Audi es más rápido, exacto y completo que las conocidas soluciones TMC y TMC pro, y también incluye carreteras comarcales y ciudades. Su base de datos se alimenta principalmente de cientos de miles de smartphones y dispositivos de navegación que se llevan en los vehículos y que comunican su posición actual regularmente a un proveedor a través de la red de telefonía móvil. Una vez procesados, dichos datos, anónimos, dan como resultado una imagen diferenciada de la densidad del tráfico en las carreteras. La Información de tráfico Audi online está disponible en muchos países europeos.
Otro servicio de Audi connect es la búsqueda Point of Interest, que se puede manejar a través del control por voz. El conductor del Q5 únicamente tiene que seleccionar el lugar de destino y decir el término que le interesa, como por ejemplo el nombre de un restaurante conocido.
El comando de voz, que se denomina voice tag, se transforma en un paquete de datos y se envía a los motores de búsqueda de Google. Las respuestas, que en este ejemplo aparecen en el monitor de a bordo, suelen incluir el número de teléfono del restaurante con información adicional. Un solo clic y se podrá reservar una mesa por teléfono.
La función Google Maps Street View ayuda al conductor a orientarse una vez que ha llegado a su destino. Con ella el conductor puede ver de manera anticipada en imágenes panorámicas de 360 grados las calles del lugar de destino. Google Maps Street View colabora estrechamente con la navegación de Google Earth.
Otra función del Audi Q5 es la aplicación para smartphones Audi music stream. Con ella el usuario puede recibir más de 3.000 emisoras de radio de Internet, memorizar sus favoritas en el teléfono móvil y manejarlas a través del sistema MMI navigation plus mediante la conexión WLAN. El sonido se reproduce por el equipo de audio del vehículo.
El equipamiento
El Audi Q5 remodelado presume de un equipamiento de serie muy abundante. Junto a los elementos técnicos y de confort ya indicados incorpora un vasto paquete de sistemas de retención, que incluye airbags de gran tamaño, airbags laterales delante y el sistema de airbags para la cabeza; los cinturones de tres puntos delanteros están equipados con tensores y limitadores de fuerza. En caso de una colisión trasera, el sistema integral de reposacabezas ofrece un seguro apoyo para el torso y la cabeza del conductor y del acompañante. Las fijaciones Isofix para asientos infantiles en las plazas traseras también se equipan de serie.
Además Audi ofrece muchos equipamientos opcionales, muchos de ellos procedentes del segmento de lujo. Cabe destacar, por ejemplo, los airbags laterales en la parte trasera, la fijación Isofix para el asiento del acompañante, el sistema de información al conductor con pantalla en color, el paquete de iluminación, el sensor de luz y lluvia, el asistente para las luces de carretera, los retrovisores exteriores abatibles eléctricos y la llave de confort para acceder cómodamente al vehículo.
El climatizador automático de confort de tres zonas, que integra un nuevo filtro de polvo fino, el gran techo de cristal panorámico de dos piezas, la calefacción estacionaria y las cortinillas para las ventanillas laterales traseras garantizan el mejor de los climas en cualquier situación. El denominado paquete de confort está compuesto por una serie de atractivos equipamientos opcionales. El paquete de asistentes integra el adaptive cruise control, el Audi active lane assist y el Audi parking system plus.
Los precios y el mercado
El Audi Q5 remodelado llegará a los concesionarios a finales de verano; a pesar de la amplia revalorización, su precio apenas se ha incrementado. El 2.0 TDI de 177 CV (130 KW), por ejemplo, es sólo 150 euros más caro que el modelo anterior de 170 CV (125 KW). El precio básico para el Audi Q5 2.0 TDI de
143 CV (105 KW) es de 35.200 euros.
El Audi Q5 es todo un triunfador, y en el mercado europeo lidera claramente la categoría de los SUV del segmento medio. Los clientes del Audi Q5 son personas interesadas en la tecnología, en un estilo de vida elegante y en la cultura. Lo que más valoran del Q5 es su imagen y su fiabilidad.
El Audi Q5 hybrid quattro
El deportivo Audi Q5 hybrid quattro es el primer híbrido puro en la categoría Premium del segmento medio con una batería de iones de litio de serie. Concebido como híbrido paralelo, aúna las prestaciones de un seis cilindros y el consumo de un cuatro cilindros. La propulsión corre a cargo de un 2.0 TFSI de 211 CV (155 KW) y de un motor eléctrico con hasta 54 CV (40 KW) y 210 Nm; la potencia de sistema asciende a 245 CV (180 KW) y el par motor de sistema a 480 Nm.
El Audi Q5 hybrid quattro acelera de 0 a 100 km/h en 7,1 segundos y alcanza una velocidad punta de 225 km/h. A una velocidad constante de 60 km/h puede recorrer una distancia de 3 km en modo exclusivamente eléctrico; la velocidad punta en modo eléctrico es de 100 km/h. Su consumo medio se limita a 6,9 litros a los 100 km, lo que equivale a unas emisiones de CO2 de apenas 159 g/km.
El SUV híbrido de Audi es capaz de circular únicamente con el motor de combustión, únicamente con el motor eléctrico, y en modo híbrido; además puede entrar en modo de recuperación o en modo de aceleración intensa (boost). El conductor dispone de tres programas para elegir: el grupo de características EV (Electric Vehicle) da prioridad al modo eléctrico, el programa D optimiza el consumo de ambos motores, y el modo S ha sido concebido para una conducción deportiva.
Para la transmisión de la fuerza se ha optado por un tiptronic de ocho relaciones ampliamente modificado que funciona sin convertidor de par. Su lugar lo ocupa el motor eléctrico en forma de disco, que está combinado con un embrague multidisco. Dicho embrague acopla o desacopla el motor eléctrico y el motor TFSI y funciona con extraordinaria precisión en cualquier situación, de un modo suave y rápido.
El acumulador de energía consiste en un sistema de batería de iones de litio que pesa sólo 36,7 kg; la compacta unidad, situada debajo del suelo de carga, no reduce el volumen útil del maletero. La batería, compuesta por 72 celdas, ofrece 1,3 kWh de energía nominal y rinde 39 KW de potencia.
En función de las necesidades se refrigera a través de dos vías: con aire procedente del habitáculo del vehículo o con aire procedente de un circuito de refrigeración acoplado al climatizador automático principal.
Un compacto y ligero módulo electrónico de potencia, refrigerado también con agua al igual que el motor eléctrico, transforma la corriente continua de la batería en corriente alterna. El módulo electrónico de potencia integra un transformador CC/CC encargado de acoplar los consumidores en la red de a bordo de 12 voltios a la red de alta tensión. En ésta, todos los componentes relevantes están galvánicamente aislados, es decir, sin conexión conductora con el resto del vehículo. Cuando el tensor del cinturón o los airbags se activan, el sistema de alto voltaje se desconecta automáticamente de la tensión.
Imagen deportiva: ruedas de 19 pulgadas en diseño de turbina
En comparación con los otros modelos de la serie, el Q5 hybrid quattro presenta unas dimensiones ligeramente diferentes en altura, ancho de vía y batalla. A simple vista se da a conocer por las inscripciones hybrid, las llantas de 19 pulgadas en diseño de turbina de diez brazos y en las molduras de acceso con inscripciones hybrid. Los paragolpes están completamente pintados, y como color exclusivo para la carrocería se pone a disposición del cliente el Plata polar metalizado.
El concepto de indicación del Audi Q5 hybrid quattro muestra de un modo transparente los estados operativos del sistema de propulsión híbrido. En lugar del cuentarrevoluciones, el cuadro de instrumentos integra un powermeter, cuya aguja indica la potencia global del sistema en una escala con un porcentaje del
0 al 100.
Una segunda escala se halla dividida en segmentos de colores; los sectores verde y naranja indican claramente el modo en el que está circulando en ese momento el Q5 hybrid quattro. Un instrumento adicional señala el estado de carga de la batería.
Al mismo tiempo el display en color del sistema de información al conductor y el monitor del MMI navigation plus, perteneciente también al equipamiento de serie, indican los flujos de fuerza y los modos operativos en el sistema híbrido en forma de elegantes gráficas. La pantalla del MMI muestra además una estadística diferenciada del consumo y de la recuperación de energía.
El tren de rodaje realza el carácter deportivo del Audi Q5 hybrid quattro. Reduce 25 mm la altura de la carrocería; las llantas de aleación ligera de 18 pulgadas se montan de serie y las de 20 pulgadas están disponibles con carácter opcional. Los grandes frenos garantizan una potente deceleración, y el servofreno es alimentado adicionalmente a través de una bomba de vacío eléctrica. Una compleja estrategia de regulación adapta las operaciones de frenado a los diferentes requisitos de la conducción en modo eléctrico y de la recuperación de energía.
El compresor del climatizador dispone de un accionamiento eléctrico de alto voltaje; un calefactor eléctrico adicional completa la calefacción del habitáculo. En total, los componentes específicos del sistema híbrido suponen un peso adicional inferior a los 130 kg. El peso en vacío del Audi Q5 hybrid quattro, sin conductor, es de 1.910 kg, a pesar del abundante equipamiento, que incluye también el Audi Sound System y la banqueta trasera plus.
Su precio de partida es de 53.900 euros.
El nuevo Audi SQ5 TDI
El Audi SQ5 TDI, que llegará a los concesionarios a finales de verano con un precio de 58.500 euros, es el nuevo modelo de máxima potencia de la serie Q5 y a su vez el primer modelo S equipado con un motor diésel en la historia de Audi. El 3.0 TDI, con dos turbocompresores, rinde nada menos que 313 CV (230 KW) (313 PS) y genera 650 Nm de par entre las 1.450 y las 2.800 rpm.
Este diésel V6, con una cilindrada de 2.967 cc, ha sido concebido como un biturbo; una chapaleta une los dos compresores conectados en línea. La refrigeración de las culatas, los tiempos de mando y la alzada de los árboles de levas de admisión, los pistones, su refrigeración por dispersión de aceite y los pernos de pistón se han adaptado a este concepto de alto rendimiento. El sistema common rail establece hasta 2.000 bares de presión y realiza hasta ocho inyecciones parciales en los cilindros en cada carrera. Un actuador de sonido integrado en el sistema de escape aporta al V6 biturbo un sonido profundo y armonioso.
El Audi SQ5 TDI resuelve la aceleración de 0 a 100 km/h en 5,1 segundos, y alcanza una velocidad punta de 250 km/h. El consumo se limita de media a 7,2 litros a los 100 km, un valor que se consigue también gracias a la gestión térmica, al sistema de recuperación de energía, al sistema de arranque y parada y a la bomba de aceite regulada. Un tiptronic de ocho relaciones de cambios rápidos y suaves y la tracción integral permanente quattro transfieren las fuerzas del motor a la calzada.
El rígido tren de rodaje S reduce 30 mm la altura de la carrocería, las ruedas de 20 pulgadas en diseño de cinco radios paralelos están cubiertas con neumáticos del formato 255/45. A petición del cliente Audi ofrece ruedas de hasta 21 pulgadas de diagonal con neumáticos de dimensiones 255/40. Las pinzas de freno negras en el eje delantero están decoradas con emblemas S. El sistema de conducción dinámica Audi drive select pertenece al equipamiento de serie.
Entre los detalles especiales en el diseño destacan la parrilla Singleframe en gris platino con sus barras dobles galvanizadas en óptica de aluminio, el spoiler del borde del techo y los paragolpes modificados. Las carcasas de los retrovisores exteriores se han realizado en óptica de aluminio; los faros xenón plus con luz diurna LED pertenecen al equipamiento de serie, y en la trasera destaca el sistema de escape con sus cuatro tubos finales elípticos. Si el cliente lo desea Audi pinta el nuevo modelo de máxima potencia en los colores de efecto perla Azul Estoril o Negro pantera.
El habitáculo es de color negro, con el revestimiento interior del techo disponible opcionalmente en plata. Los asientos deportivos con regulación eléctrica se tapizan en cuero napa perla y Alcantara, disponibles en tres colores. Las inserciones decorativas se realizan en aluminio cepillado, y opcionalmente también en CFRP, lacado brillante o aluminio Beaufort.
Las escalas de los instrumentos son de color gris, las agujas blancas; los pedales y las levas de cambio resplandecen en óptica de aluminio. Algunos detalles como el pomo de la palanca de cambio S, los emblemas S en las molduras de acceso, en el botón de arranque y en el volante de formas específicas, la pantalla de bienvenida S y el paquete de iluminación aportan al interior pequeños toques de elegancia.
| Fuente: Audi
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